La oferta rusa maniobra para tumbar la venta del Valencia a Peter Lim

El lunes de resaca tras la venta de la mayoría accionarial del Valencia a Peter Lim llegó con dolor de cabeza. Los rusos de Zolotaya Zvezda, la oferta que intentó hacer saltar la banca el sábado con una puja al alza de 616 millones de euros, se replegó para el contraataque con el fin de que no se ejecute el traspaso del 70,4% de las participaciones del club a Meritón, la empresa del magnate asiático que recibió la unanimidad de los 22 patronos de la Fundación para ser el nuevo propietario del club.

La última palabra para la venta del Valencia la tiene el Protectorado de Fundaciones, un órgano que preside el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, y que es el que velará para que se haya cumplido la ley si se autoriza la venta del Valencia a Peter Lim.

Los rusos de Zolotaya, la oferta que lideran en Valencia Mikhail Bosco y Michael Hellenbrand, han elegido la vía directa para tratar de evitar esa venta y ayer decidieron registrar en el Protectorado de Fundaciones su oferta, que aseguran que es la mejor de todas las que se han presentado al proceso de compra del Valencia. Entienden que conforme a ley, la propuesta económica de Zolotaya Zvezda era la más alta de todas con diferencia. El viernes pasado la incrementaron hasta los 616 millones de euros, de los que 107 eran para la Fundación del Valencia. La mejora la leyó la notaria Ana Julia Roselló, que ha sido la garante de todo el proceso, ante los patronos reunidos en el Valencia Palace el sábado pasado.

Este mensaje de los rusos es el paso previo a su decisión posterior. Con esa medida tratan de que no se firme ante notario la enajenación del 70,4% de las participaciones del club. Un aviso al Protectorado de que su autorización no se ajusta a la Ley de Fundaciones de la Comunitat Valenciana. Si al final se firma, los representantes de Zolotaya, que dirigen toda su operación desde el sur de la Comunitat, aseguraron ayer que el siguiente paso será impugnar la decisión, como ya adelantó este periódico durante el proceso de venta. La idea de recurrir la decisión siempre ha estado entre sus planes: «Ya advertimos de que lo haríamos sí se beneficiaba a una de las propuestas».

La ley establece que para recibir la autorización del Protectorado por la enajenación de más de un 20% de los bienes y derechos de una fundación este exige que esté acompañada de un informe pericial que valide la decisión. Un documento que el Patronato considera que es el documento que la consultora PwC elaboró. La asesora del Valencia y de la Fundación remitió una carta a Aurelio Martínez para que no utilizara el informe en la reunión del sábado. Una recomendación de la que se hizo caso omiso porque se entendió que es un servicio pagado e incluso se fue más allá: la firma de los patronos se sustentó en el informe elaborado por la consultora.

El artículo 22.2, la clave

El artículo 22.2 de la Ley de Fundaciones de la Comunitat Valenciana dice: «La enajenación, gravamen o arrendamiento de los bienes y derechos que formen parte de la dotación, o estén directamente vinculados al cumplimiento de los fines fundacionales, requerirán la previa autorización del Protectorado, que se concederá si existe justa causa debidamente acreditada».

Además, «si el valor de dichos bienes y derechos supera el 20% del activo de la fundación que resulte del último balance anual, la solicitud de autorización deberá ir acompañada de una valoración pericial que acredite la adecuación a precios de mercado de la contraprestación económica que vaya a ser recibida por la fundación, que será debidamente comprobada por el Protectorado».

Zolotaya Zvezda, como destapó este periódico a mediados de febrero, llegó a Valencia a la búsqueda de apoyos que sustentaran su propuesta de compra. Durante el proceso se ha mostrado como una de las más fuertes, aunque su gran obstáculo ha sido la tardanza en confirmar la garantía bancaria de su inversión. La validez la certificaron el viernes en la notaría de Ana Julia Roselló, al tiempo que elevaron su propuesta de compra del club.

Propuesta de mejoras

Los rusos, como se les ha conocido en este proceso, siempre han asegurado que desconocían la posibilidad de que mitad de la negociación se pudiera subir la oferta de compra. La afirmación choca con el hecho de que el resto de los inversores reconocen que esa comunicación se dio y que por eso la americana Cerberus y la del asiático Peter Lim sí que cambiaron las variables de sus propuestas para tratar de ganar músculo.

El Patronato no consideró el sábado el ultimo movimiento de los rusos al entender que estaba fuera de plazo y que su propuesta final no estaba incluida en el informe de PwC. El hecho de que hubieran aumentado la cifra no estaba avalada por el documento pericial que exige el artículo 22.2 de la Ley de Fundaciones de la Comunitat Valenciana.

Los rusos no comparten esta apreciación porque consideran que Peter Lim sigue negociando con Bankia la forma de pago, por lo que está en la misma situación que ellos.

«El Protectorado no puede autorizar que se venda a una oferta que ofrece menos dinero que otra. Iría contra la ley de Fundaciones de la Comunitat Valenciana. Vendería por debajo del precio de mercado. La votación del sábado estuvo viciada», señaló un portavoz de Zolotaya Zvezda.

Además, defendieron la legitimidad de su actuación: «No queremos ser un obstáculo en el proceso de venta del Valencia. Sólo queremos poner en conocimiento del Protectorado cuál es la situación. Lim no es la mejor opción. Si al final se firma ante notario, tendremos que recurrir la venta», continuó la misma fuente.

El Consell, que domina el Protectorado de Fundaciones, señaló que respetaría la decisión adoptada por el Patronato y que no pondría ninguna traba. Este órgano lo preside el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, que es muy amigo de Amedeo Carboni, uno de los pilares de la oferta rusa.