Los 94 millones de Lim alivian a todas las partes

El guión siguió el curso previsto en el acuerdo firmado por Meriton y la Fundación del Valencia el pasado 24 de octubre. La fecha del cierre de la firma se estableció hace semanas en el 1 de diciembre y sólo varió el lugar de la firma. El contrato establecía que fuera en una notaría de la calle Jorge Juan, pero todo se traslado a la sede del Valencia. Cerca de las tres de la tarde, de nuevo sonrisas de oreja a oreja, para escenificar una firma que, ahora sí, ya es definitiva. La última de todas después de que el club se lleve vendiendo al mismo inversor desde el 17 de mayo. Meriton Holdings, la empresa de Peter Lim, es la nueva propietaria del Valencia al hacerse con el 70,06% de las acciones.

La rúbrica sobre los papeles fue el alivio económico para la Fundación y la Generalitat. Con la firma iba el pago de 94 millones -88 para hacer frente a la deuda y 6 del aval-. El primero en cobrar, como así establece el protocolo, ha sido Bankia y, como detalló LAS PROVINCIAS el pasado viernes, la Fundación queda liberada de todas sus cargas y la Generalitat, que en algún momento del tortuoso pasado se vio como propietaria del Valencia, recuperó los 6 millones de euros en forma de aval que había prestado el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). El Consell valenciano, visto lo acontecido, será difícil que se meta de nuevo en berenjenales deportivos con deuda de por medio.

Para celebrarlo, la Generalitat emitió un comunicado a media tarde con el fin de publicitar la recuperación de un dinero que es de todos los valencianos. Seis millones de euros no caen todos los días del cielo, o de Meriton: 4,9 millones del aval y 1,2 millones de los intereses. Este era el cometido principal del Gobierno valenciano cuando asumió el papel de hombre bueno en una negociación que se quedó estancada en algunos momentos.

Una vez cerrada la operación, Lim sólo tiene dos obligaciones. Una terminar el nuevo Mestalla antes del centenario el club -es el 18 de marzo de 2019- aunque en el contrato, según ha podido comprobar LAS PROVINCIAS, no figura ni una sola garantía. El cometido de Meriton es aportar el dinero necesario y en el contrato se le exige que incluso busque financiación externa. Si es necesario, Lim deberá echar mano de los «hasta» 100 millones de euros que presta al Valencia. La otra obligación es informar al pequeño accionista del cualquier movimiento en la sociedad.