A Vigo con todas las alarmas encendidas

valencia. El Valencia viaja esta tarde a Vigo con todas las alarmas encendidas. Primero porque el partido ante el Espanyol dejó ciertas dudas en lo futbolístico más allá del resultado y segundo porque sirve como ejemplo la dura derrota en Riazor (3-0) que el conjunto blanquinegro encajó contra todo pronóstico cuando acumulaba una racha que por entonces nadie sospechaba echaría abajo el colista de la tabla. Vuelta a Galicia y de nuevo Nuno mentalizando a sus hombres para afrontar el duelo con todas las garantías desde el primer minuto. Eso hizo ayer el técnico portugués en la ciudad deportiva de Paterna. Antes de iniciar el entrenamiento, Nuno charló durante cinco minutos con sus hombres para concienciarles de la importancia de los tres puntos de Balaídos. Luego, en una imagen ya habitual, el técnico fue manteniendo breves charlas individuales con varios futbolistas.

«Los equipos pasan por distintos momentos a lo largo de la temporada, tenemos que redoblar nuestra atención. Los equipos que están en mala situación dan el doble para volver a estar como estaban antes, tendremos que estar a tope contra el Celta para poder lograr la victoria», dijo Rodrigo Moreno, que tiene muchas opciones de estar en el once mañana por la sanción a Gayà y la lesión de Piatti. El hispano-brasileño conoce bien la casa (vivió siete años en Vigo y fue canterano del Celta) pero seguro que nunca padeció una racha como la que atraviesa en estos momentos el conjunto de Balaídos.

Después de un inicio de Liga notable -victoria en el Camp Nou incluida-, el Celta se desinfló y suma nueve partidos consecutivos sin conocer la victoria. Ocho de ellos sin marcar. El equipo de Berizzo es noveno en la tabla precisamente por los puntos que arañó en las primeras jornadas (ahora suma veinte), pero tras la abultada derrota de Copa del Rey frente al Athletic de Bilbao (2-4) se han desatado las primeras críticas severas hacia el entrenador. Tanto, que el puesto de Berizzo corre serio peligro si el Valencia se lleva los tres puntos mañana y el Celta no puntúa en la siguiente jornada frente al Espanyol.

Con ese panorama de necesidad e incertidumbre va a tener que lidiar el conjunto blanquinegro para mantener una racha que acumula ya cinco partidos sin conocer la derrota. El trabajado triunfo contra el Real Madrid desató la euforia -de nuevo- en el valencianismo y en Copa del Rey, uno de los grandes objetivos del club esta temporada, casi se paga caro con un resultado que podría haber puesto la eliminatoria muy cuesta arriba. «Empezamos muy bien y marcando temprano y el equipo se relajó un poco. El Espanyol tuvo momentos de dominio y tuvieron ocasiones para llevarse la victoria pero lo importante es que ganamos nosotros y que la eliminatoria se decidirá allí», explicó Rodrigo, admitiendo que la relajación, como ya sucedió ante el Rayo Vallecano, había hecho acto de presencia en las filas del Valencia.

Cuenta Nuno para Balaídos con el regreso de sus titulares después de haber introducido muchos cambios para recibir al Espanyol. Pendiente de Alves, el portugués recupera a Barragán, Mustafi, Enzo Pérez y Paco Alcácer. Queda la duda de si el puesto de carrilero izquierdo será para Rodrigo de Paul o Rodrigo Moreno. Aunque el hispano-brasileño ya se ofreció ayer al técnico para defender y atacar en banda si es necesario. «No sería la primera vez, este año ya he jugado en la derecha y en la izquierda y estoy aquí a disposición del míster, estamos preparados para lo que decida. Al final estamos para jugar lo máximo posible. Si decide que puedo empezar jugando, mejor para mí», admitió.

Con más seguridad 'avanzó' Rodrigo que el Valencia repetirá en Balaídos el 3-5-2 que le dio la victoria contra el Eibar, Real Madrid y Espanyol. «El míster ha encontrado su sistema y creo que el equipo ha jugado bien y ha ganado en estos partidos», defendió el hispano-brasileño, que reconoce no obstante que jugar junto a Alcácer y Negredo en un dibujo con tres delanteros es «prácticamente imposible». De cualquier forma, la baja de larga duración de Piatti y la marcha de Sophiane Feghouli con Argelia para disputar la Copa de África suponen, sobre el papel, más minutos de protagonismo para Rodrigo, que enfrió su relevancia en el equipo por dos expulsiones sin justificación.

Para el Valencia, esta jornada supone una inmejorable ocasión para recortar puntos con Atlético de Madrid y Barcelona, que se van a medir entre ellos en el Camp Nou. Ambos están con 38 puntos y el equipo blanquinegro tiene 34, por lo que consiguiendo la victoria se puede colocar a sólo uno de rojiblancos o culés. De momento, en el Valencia siguen pensando en el objetivo Champions y nadie quiere incluir a los blanquinegros entre los candidatos a llevarse la Liga.

«Este año la Liga está competitiva, ganamos al Madrid y la Real Sociedad ganó al Barça. Hemos tenido partidos contra equipos que teóricamente eran peores y hemos perdido, hay que estar centrado porque hay que sumar y sumar, como dice el míster», dijo Rodrigo. «Hemos pasado por distintos momentos esta temporada, empezamos muy bien, luego tuvimos un pequeño bajón y ahora volvemos a las victorias y nuestro mejor nivel. Esto es muy largo, todos tienen estos momentos, nos tenemos que centrar en los tres puntos cada semana y mantener la línea, seguro que las cosas al final van a salir bien», continuó.

Reunión por Carles Gil

Al margen del partido ante el Celta, la secretaría técnica sigue trabajando a destajo para decidir entradas, salidas y renovaciones pendientes. Uno de los casos que están sobre la mesa es el de Carles Gil. El valenciano está a la espera de que sus agentes mantengan una reunión con Rufete y Salvo para saber qué planes tiene el club con él. Sobre el tablero están las diversas ofertas que Carles Gil tiene del extranjero (una jugosa de la Premier League), aunque de momento el futbolista está tranquilo y su idea, si el club le transmite que cuenta con él, es la de prorrogar su contrato con el Valencia, que expira en junio de 2016.

El zurdo tiene algo claro y lo ha mantenido desde que en verano regresó a Mestalla: no está dispuesto a aceptar más cesiones (varios equipos de Primera se han interesado por él) porque entiende que esa etapa ya la cumplió en sus dos temporadas como futbolista del Elche. Sólo contemplaría esta opción si antes se firma su renovación con el Valencia. Carles Gil ha jugado ocho partidos de Liga (269 minutos, un gol) y tres en la Copa del Rey.