Nuno pregunta a Enzo si tiene alguna queja por el cambio

El Atlético estaba relativamente cómodo con la ventaja del gol de Koke, quedaban 23 minutos para acabar el encuentro, Enzo estaba completando otro partido gris desde el plano individual y se mostró en ese momento desde la banda el cartel para el cambio con el dorsal 15. No es la primera vez que Nuno decide sustituir al argentino, que tras jugar completos sus primeros seis encuentros, el del Calderón fue la tercera ocasión en la que no acabó sobre el terreno de juego.

Enzo observa que el elegido para que entre André Gomes es él y enfila el camino del banquillo corriendo. Pero en lugar de hacerlo por la línea del centro del campo como suele ser lo cotidiano, lo hace en paralelo alejado de esta manera de la zona en la que se encontraba su entrenador. Nuno se queda con el brazo extendido para saludarle, gesto habitual del preparador valencianista en cada cambio que efectúa. En este caso, Enzo ni le mira y deja una fotografía ciertamente sospechosa.

Ayer, en la Ciudad Deportiva de Paterna, el técnico reunió a sus futbolistas en el tradicional círculo cada vez que arranca el trabajo de la semana. El entrenador valencianista ofrece un monólogo de trece minutos y en ese tiempo se dirige a Enzo, según desvelaba ayer Cope Valencia, y le preguntaba si tiene algún tipo de problema con él al negarle el saludo cuando fue sustituido en el Calderón. «No era por usted. No tengo nada personal», responde el jugador. Asunto zanjado.

Por lo que parece, el tono del discurso de Nuno no fue ni mucho menos agresivo con sus jugadores. El portugués ha sabido conducir hasta la fecha este vestuario y pretende que se mantenga la sintonía en las doce jornadas que restan.

Y uno de los deseos de Nuno es el de recuperar la mejor versión de Enzo Pérez, algo que no se ha podido comprobar todavía en el Valencia.

Pese a todo, titular

Quizás el propio jugador es el primero en darse cuenta de que su juego está por debajo del nivel que es capaz de alcanzar. Por eso mientras Nuno se dirigía ayer a sus pupilos, al internacional argentino se le vio cabizbajo. Situado detrás de Rodrigo, Enzo se pasó buena parte del discurso del entrenador mirando hacia el césped.

Titular indiscutible desde que llegó por esos 25 millones de euros que pagó Lim al Benfica en este mercado de invierno, el argentino ha actuado como pivote defensivo -el día de su estreno- y se ha ubicado posteriormente a la altura de Parejo cuando Nuno ha decidido situar a tres en el centro del campo y algo más disperso aún cuando ha actuado una línea de cuatro. El perjudicado ha sido André Gomes, un jugador que en la primera vuelta resultó ser uno de los más destacados del equipo. Ahora, sin embargo, el rol de André Gomes dentro del equipo parece haber cambiado. En el Calderón jugó esos 23 minutos -y colaboró en la notable mejoría del equipo- pero contra la Real- no jugó un solo minuto.