M. RODRÍGUEZ
Lunes, 29 de junio 2015, 22:28
valencia. El Plan Porchinos tiene los días contados. El Valencia considera agotada la vía judicial. Tras el vuelco electoral, ni el Ayuntamiento de Ribarroja ni la Generalitat batallarán tampoco en el Constitucional contra la sentencia del Supremo que anula el plan urbanístico que contemplaba la futura ciudad deportiva blanquinegra y cerca de 3.000 viviendas. Durante la primera quincena de julio, el Consistorio convocará un pleno para acatar el fallo. En ese instante, el proyecto que impulsó Juan Soler para financiar el club a través del ladrillo, quedará definitivamente en papel mojado.
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En el Ayuntamiento de Ribarroja ya están preparando el día después. Los servicios jurídicos municipales trabajan en la redacción del punto que se someterá a votación en el pleno. También evalúan cómo actuar a partir del momento en que Porchinos vuelva a ser suelo agrícola protegido.
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