Un arreón para el Valencia

Si lo de Vigo, como recuerda Nuno, es la realidad de este Valencia y no la chapucería de Gante, tiempo de sobra y oportunidades de todo tipo va a tener este equipo para demostrarlo con solvencia. De aquí a final de año, contando incluso el morboso Valencia-Real Madrid del 3 de enero ya de 2016, el conjunto blanquinegro afronta el arreón más comprometido y exigente de la temporada. Once partidos en 44 días. Ahí es nada. A partido cada cuatro días. Se trata sin duda de la verdadera oportunidad para alejar las sospechas y demostrar que esta plantilla está confeccionada y capacitada para aguantar el ritmo que exige un equipo grande.

Hasta ahora, el Valencia ha pasado muchos más apuros de los previstos cuando ha tenido que manejar dos competiciones: Liga y Champions. Pues ahora, además, se le suma al asunto la Copa del Rey. No es que el cruce con el Barakaldo (miércoles día 2 y 16 de diciembre) preocupe mucho desde el punto de vista deportivo -al haber partido de vuelta se evita la sorpresa-, pero esa doble confrontación con el conjunto vasco puede crear cuanto menos distracción y un cansancio extra si Nuno decide apostar por la gente del once titular habitual para tener más seguridad en la visita a terreno bilbaino.

La Liga coge interés para el Valencia, incapaz por ahora de meterse en las once jornadas disputadas en alguna de las posiciones que dan acceso a Europa. Es una de las cuentas pendientes que tiene Nuno, que se salvó poco menos que de la debacle en Balaídos. Si hasta ahora los valencianistas tan sólo han tenido a Celta y Atlético como rivales con cierto peso, tras la cita del sábado que viene con Las Palmas en Mestalla la cosa se pone cuesta arriba. Primero hay que pasar por el Sánchez Pizjuán y luego recibir al Barça. O el Valencia se mete arriba con puntos y con el refuerzo moral que eso conlleva o retrocede en todos los aspectos.

En Liga, de aquí a ese 3 de enero, hay que medirse además de Las Palmas, Sevilla y Barcelona, con Eibar, Getafe, Villarreal y el Real Madrid (ya en ese 2016). Esta temporada no para la competición en el cambio de año, por lo que el tiempo de descanso será menor. Al Valencia sólo le faltará para entonces el recuperar a Diego Alves. Además, no hay que perder de vista la Champions. Tras Las Palmas hay que visitar San Petersburgo (día 24), con un Zenit pensando ya en los octavos. Pero luego (9 de diciembre) hay que jugársela con el Lyon. El batacazo ante el Gent obliga a no despistarse porque no llegar a los octavos sería demasiado duro para todos.