Pique por la Champions entre enemigos íntimos

Un partido entre el Valencia y el Getafe se puede definir ya como un clásico moderno. El pique no viene desde muy lejos, pero especialmente en los dos últimos años hubo de todo entre ambos equipos. Un césped horrible, expulsiones, peleas entre jugadores, gestos hirientes y provocativos, choques coperos, objetivos comunes y por último, cruces de declaraciones entre entrenadores y ejecutivos que exigieron alguna que otra llamada posterior para enfriar el asunto. El duelo de hoy en el Coliseum viene cargado de morbo y se anuncia a bombo y platillo porque el que gane duerme tercero. Es decir, es un enfrentamiento clave por ocupar plaza Champions a final de curso y además está en juego el golaveraje después de que la ida en Mestalla se resolviera con un empate (3-3).

Recuerda el Valencia que en ese partido el árbitro omitió un clamoroso penalti de Cucurella y Bordalás, que en la línea de Celades asegura no estar pendiente de las polémicas, sí destacó «un penalti a Jaime Mata y la expulsión injusta de Djené». «Pensamos en nuestro trabajo y en el día a día, no en las polémicas. Los que quieran generar polémicas, es su problema. El VAR es bueno para el fútbol. Siempre ha habido intentos de condicionar los partidos», dijo Bordalás un día después de que Ricardo Arias apuntara públicamente a los árbitros por la eliminación copera: «Nos echó el VAR, no el Granada. Que lo sepa todo el mundo».

Celades, que es 'nuevo' en estas lides porque las pullas empezaron cuando Marcelino estaba en el banquillo, admitió ser consciente de la rivalidad entre los dos equipos aunque no quiso profundizar en el asunto. «No estábamos el año pasado, pero somos conscientes de lo que pasó. Nos tenemos que centrar en los futbolístico. Está claro que ahora mismo hay muy poca distancia entre los dos equipos y estamos luchando por la misma situación. El partido contra el Getafe será muy duro», pronosticó el técnico del Valencia, que ve a su equipo «motivado» para retomar la Liga después de perder su corona en la Copa del Rey y a menos de quince días de viajar a Milán para jugar los octavos de la Champions contra el Atalanta.

Bastante tiene Celades con el Getafe, equipo al que elogió en repetidas ocasiones, y los problemas de lesiones que siguen atosigando a su Valencia como para abrir nuevos frentes. La mermada expedición blanquinegra llegó ayer por la tarde a Madrid sin nueve futbolistas. Hay dos sancionados (Coquelin y Wass), uno que se lo pierde por decisión técnica (Jaume Costa) y seis ocupantes de la enfermería: Piccini, Garay, Gameiro, Manu Vallejo, Cillessen y Cheryshev, con el alta médica pero todavía sin el ritmo suficiente para competir.

Respecto a la baja del portero holandés, Celades se vio obligado a explicar por qué el Valencia emitió ayer un parte médico cuando no ha disputado los últimos once partidos. Se lesionó Cillessen contra el Levante (7 de diciembre), luego ocupó el banquillo en cuatro compromisos con Jaume como titular y recayó en el calentamiento del duelo ante el Logroñés del 22 de enero: «No habíamos creído conveniente dar un parte médico porque pensábamos que no era mucho. Y Cillessen ha realizado entrenamientos, pero no se encontraba bien y no podíamos contar con él. Sigue igual y por eso hemos decidido dar el parte médico». El comunicado explica que el internacional holandés «presenta una inflamación en su cadera izquierda» y no tiene fecha de reaparición prevista. Tampoco es más concreto el parte médico referente a Kevin Gameiro, cuyo problema es una lesión muscular en el muslo izquierdo pendiente de evolución en los próximos días.

Con tantas ausencias no tiene demasiado donde elegir Celades. Gayà regresa al lateral izquierdo y Florenzi será titular en el derecho mientras que Kondogbia se juntará a Parejo en el centro del campo. Arriba no hay muchas dudas: Maxi Gómez y Rodrigo Moreno.