El Ayuntamiento redobla su presión a Lim para que reinicie el nuevo estadio de Mestalla

Compromís y el PSPV, que mantienen diferencias en algunos proyectos pendientes de desarrollar en Valencia, se muestran unidos en su deseo de meter presión al Valencia para que concluya el nuevo estadio y ejecute la Actuación Territorial Estratégica (ATE) de Mestalla. Así quedó claro ayer tras escuchar al alcalde Ribó, cuando dijo que hace suyas «totalmente» las palabras de la socialista Sandra Gómez, concejala de Desarrollo Urbano, quien hace unos días urgía al club a retomar las obras.

«No lo he dicho de una forma tan explícita, pero quiero decirle a este señor que vive en Singapur que tiene que cumplir los compromisos, está claro», dijo en referencia al propietario, Peter Lim, para añadir que le molestó «muchísimo las declaraciones de su hija del otro día, me molestaron profundamente porque desprecia el sentimiento de miles de personas, que para ellos el Valencia CF no es un negocio, sino un sentimiento».

«La opinión de Sandra Gómez la suscribo al cien por cien», reiteró. La vicealcaldesa dijo que en los últimos meses se han producido varias reuniones para que se reanuden las obras y pueda ejecutarse la ATE, con un calendario ampliamente superado hace años.

«Tenemos que dar ya una solución; la afición necesita que se acabe el nuevo estadio y resolver el suelo de Mestalla», dijo para añadir que quien es propietario para mandar también debe cumplir con los compromisos«. La declaración corresponde a la Generalitat y por lo tanto su caducidad también, aunque el gobierno municipal quiere acelerar al máximo el proyecto, tanto en lo que se refiere a la licencias de obras como a la ejecución de las mismas.

La polémica a la que se refería ayer Ribó fue el mensaje en una red social lanzado por Kim Lim, después borrado, donde venía a decir que su padre es el propietario del club y, por lo tanto, puede hacer lo que quiera con la entidad.

Como se sabe, el nuevo estadio que se levanta en Cortes Valencianas está inconcluso por la falta de financiación. Los nuevos responsables del club han abaratado costes para poder finalizarlo, mientras que también tramitaron hasta hace unos meses una promoción de viviendas en la avenida de Aragón que una cooperativa quería lanzar. Tampoco cuajó.

Estas circunstancias no ha amilanado al Ayuntamiento, que se ha hecho eco de los rumores de venta por parte de Lim. Gómez consideró que los nuevos propietarios deberán asumir todos y cada uno de los compromisos, sin excepción. «Ya no es una cuestión del club, sino que los aficionados tienen derecho a saber lo que va a pasar con su campo, al igual que ocurre con el resto de la ciudad», consideró la vicealcaldesa. La imagen negativa para la ciudad también es relevante en el conflicto.

Antes de las últimas elecciones municipales, fuentes municipales señalaron la conveniencia de derribar el nuevo estadio y comenzar desde cero, incluso con otros parámetros con el reparto de superficie para oficinas y más hoteles. Al final no ha salido de momento esa opción En cuanto a las viviendas en Mestalla, la cooperativa ADU Mediterráneo SL comunicó el pasado 30 de abril al Consistorio que seguían con la construcción de 600 pisos, pese a haber superado el plazo máximo para mantener la exclusividad en la gestión. Como en el resto del proyecto, el gobierno municipal se ofreció a colaborar.