La revancha de aquella terrorífica Supercopa

El Valencia tiene la oportunidad de limpiar la final de 2008 en la que el Madrid, con nueve, remontó tres goles en 12 minutos | El grupo que prepara Celades llega a Arabia más reforzado que cuando se celebró el sorteo y con un rival que también está afectado por las lesiones

Martes, 7 de enero 2020, 00:32

En Yeda (Jeddah en árabe), a casi 6.500 kilómetros de Valencia, van a tener la oportunidad los futbolistas de Celades de limpiar este miércoles, y como campeones de Copa del Rey que son, la mancha que dejaron los peores doce minutos de la historia del Valencia, en lo que a la Supercopa se refiere. Casi sin la expectación que uno de los tres títulos españoles requiere y pese a la polémica suscitada por el lugar escogido, por el formato inventado casi a traición y por el reparto del dinero poco ortodoxo escogido por Rubiales, el Valencia llegó en la medianoche del lunes la martes a Arabia mucho más favorito de lo que aparentaba hace unas semanas cuando se hizo el sorteo. Aunque desde luego no tan favorito como se puso en aquel 24 de agosto de 2008. En ese veraniego Real Madrid-Valencia de vuelta, Kang In tenía siete años y todavía era un niño coreano y ni de lejos la vería por televisión. No podía el atacante imaginar por entonces que al cabo del tiempo iba a vivir de cerca su primera gran final (se perdió la Copa del Villamarín porque estaba concentrado con su selección), con un equipo profesional como el Valencia, en un país asiático y con cuentas pendientes entre ambos equipos. Ese Madrid del 2008 fue capaz en tan sólo una docena de minutos de poner patas arriba la lógica del fútbol y de echar abajo las serias pretensiones del equipo que empezaba a entrenar un joven Unai Emery. Al 3-2 de la ida en Mestalla (con goles de Mata, Villa y Morientes) se le sumó el 0-1 en el Bernabéu de Silva en el 33'. Empató después Van Nistelrooy de penalti en el 50' pero la catástrofe llegó del 77' al 89', cuando marcaron por este orden Sergio Ramos (el único futbolista superviviente ahora), De la Red e Higuaín. Morientes hizo para los blanquinegros el definitivo 4-2 ya sin tiempo para más. De cualquier forma, lo más doloroso fue que, encima, el Madrid voltease el marcador con nueve sobre el campo porque fueron expulsados Van der Vaart (39') y Van Nistelrooy con dos amarillas (72').

Publicidad

«El sueño de una noche de verano en el Bernabeu» rezaba el titular de la crónica de este periódico en un intento de explicar el inesperado desenlace. Eran tiempos en los que la repercusión de la Supercopa perdía cierta fuerza al jugarse con las plantillas todavía a medio hacer y con sensación de ser un trofeo de verano y casi de rodaje. El meta Renan, por ejemplo, vio el encuentro en el palco madridista porque acababa de fichar por el Valencia. Ahora la situación es totalmente diferente, ya que se va a vivir a mitad de curso y de una manera un tanto extraña: con la frialdad de una afición sin identidad y sin tener muy claro cómo de serio se van a tomar el asunto los equipos grandes, y más en concreto en este primer envite un Madrid tocado por las lesiones.

En lo que al Valencia se refiere, que haya tiempo suficiente para descansar y sin el agobio de la Liga, alivia la presión que se pudiera ejercer sobre Celades. A Marcelino, Peter Lim le 'hizo la cruz' cuando apostó decididamente por la Copa del Rey en el cruce con el Getafe. De los cuatro participantes en este torneo, quizás el que más dudas está ofreciendo en su juego es curiosamente el líder de la Liga, el Barça. Valencia. Real Madrid y Atlético llegan con una dinámica positiva.

En Mestalla, y con Celades ya más reforzado que en sus inicios, los dos equipos se repartieron los puntos pero cierto es que el Madrid empató casi sobre la bocina. No estaban ese día ni Cheryshev, ni Maxi ni Gameiro, ahora ya recuperados. El problema para Celades es que se ha quedado a última hora sin Rodrigo. Y eso siempre tiene su peso. Esta temporada, los dos encuentros que se ha perdido Rodrigo por lesión, el Valencia no pasó del empate (1-1), si bien fue contra el Atlético –referencia muy válida ahora– y en Lille.

Tiene el entrenador del Valencia curiosamente dos títulos de Supercopa. Uno lo consiguió con el FC Barcelona (1996), su primer gran éxito como jugador del primer equipo. El otro lo ganó en la camiseta del Real Madrid (2001). El reto ahora lo tiene como director de orquesta.

Publicidad

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€

Publicidad