'De Torino a Mestalla' recurrirá al apoyo político para echar a Lim

El movimiento que trata de agrupar a todas las fuerzas del valencianismo para echar a Peter Lim del Valencia ya tiene intenciones (implicar a los políticos) y nombre: 'De Torino a Mestalla'. Bajo esta denominación, esta plataforma que lidera Juan Martín Queralt empieza a dar sus primeros pasos y por lo que se ve cada vez más serios. Justo una semana después de que representantes de algunos colectivos mantuvieran la primera toma de contacto, ahora ya se le ha bautizado, al mismo tiempo que se mantiene la idea de seguir abriendo la puerta a que se unan más colectivos que coincidan en la argumentación que rige de alguna forma el principio que ha activado a todos: que la única salida para la viabilidad futura del Valencia es conseguir convencer a Meriton que lo mejor es que deje se ser propietario del Valencia.

El cónclave de este lunes contó con representantes de colectivos como Torino, Viatgers, Espíritu del 86, Libertad, Agrupación de Peñas, Pequeño Accionista y Curva Nord. Todos son bien recibidos. Es más, no son los únicos porque se han lanzado invitaciones a otras formaciones y grupos de valencianistas aunque también es verdad que los hay que han preferido quedarse en una segunda línea. Pero lo que surgió como un movimiento espontáneo este verano es evidente que empieza a tomar poco a poco forma y a convertirse en una acción algo más sólida y, sobre todo, fundamentada. De hecho, una de las primeras consignas en la que se ha puesto manos a la obra este macrocolectivo es el de encontrar una fórmula jurídica adecuada para constituirse de manera formal.

Ahí surgen las opciones de convertirse en Fundación (hay que recordar que Martín Queralt fue en su día presidente de la Fundación del Valencia) o de actuar de una forma más 'light' jurídicamente hablando y quedarse en plataforma. Serán los abogados los que en la reunión de la semana próxima se pronuncien.

Hasta ese momento, en esta nueva toma de contacto se volvió a dejar claro que la estructura de esta plataforma no será piramidal. Es verdad que Queralt es la cabeza visible y el que más ánimo transmite al resto, pero todos están representados en todos los grupos de trabajo que se han establecido: dos vicepresidencias (relaciones institucionales y afición) y cuatro comisiones de trabajo (jurídica, económica, redes sociales y comunicación).

La urgencia en las actuaciones previstas y la unidad de sus miembros son dos de los apuntes que han cobrado fuerza tanto en la primera como en la segunda reunión celebrada.

Por eso, una de las primeras acciones que se quieren adoptar es el de solicitar entrevistas con los representantes políticos de las instituciones valencianas. Es evidente que hoy en día, Generalitat y Ayuntamiento tienen un papel fundamental en todo lo que tiene que ver con el Valencia (íntimamente relacionado con el nuevo Mestalla). Eso sí, antes de verse con Ximo Puig o con Joan Ribó, por ejemplo, la plataforma debe confeccionar un plan de salvación –por decirlo de alguna manera– que pueda convencer a los políticos de que el Valencia del futuro es también viable en manos de los valencianistas. Hay que tener en cuenta que precisamente, tanto Ayuntamiento como Generalitat mantuvieron recientemente entrevistas con Anil Murthy y que la exigencia de que Meriton dé el primer paso por el nuevo Mestalla quedó más que patente. De momento, Meriton aún no ha reaccionado.