De Torino, pendiente de conocer el rol del príncipe antes de actuar contra Lim

Si cree Peter Lim que la condición de príncipe le va a salvar a Tunku Ismail de zambullirse en el barro en el que está metida la actualidad valencianista, ya se puede ir quitando la idea de la cabeza y advirtiéndole a su amigo malayo de lo que le espera aquí. De Torino a Mestalla, la plataforma liderada por Juan Martín Queralt que consiguió pisar la moqueta del Palau de la Generalitat antes de que por segunda vez lo hiciera Murthy para advertirle precisamente del peligro de Meriton, le ha dado una vuelta de tuerca a más a lo que podría denominarse su equipo de vigilancia. Algunos de los integrantes de este colectivo –desde el principio se dividieron las áreas de trabajo por especialidades– ya han plasmado su intención de extremar la presión hacia el máximo accionista pero antes han decidido esperar a ver realmente qué papel y bajo qué condiciones llega el príncipe de Johor al Valencia, si para hacerse únicamente con la gestión de la sociedad o si, como parece, para hacerlo pero con el añadido de comprar un paquete importante de las acciones ya sea con un 30% de Lim o bajo la fórmula de la ampliación de capital. Es bajo ese supuesto, cuando se produjera la compraventa de la que Meriton aún no ha dicho nada, el momento en el que De Torino a Mestalla daría lo que denominan un paso decisivo estratégicamente para empujar a Lim fuera del Valencia. Desde el primer momento de su creación, la plataforma –que agrupa diversos colectivos– ya barajó el escenario judicial como una vía más que factible aunque muy lenta en los plazos para desalojar al actual máximo accionista.

Fueron los acontecimientos judiciales que se han dado en el Málaga con el jeque los que animaron a sus miembros a no descartar ese camino en los juzgados como una fórmula interesante y seguramente la más económica de todas. Porque una cosa es que Lim pueda airear sibilinamente que el Valencia puede valer en el mercado 400 millones, otra recuperar el dinero invertido y otra también muy diferente calcular el precio de sus títulos en función del valor que De Torino estima que tienen actualmente según el estado de las cuentas. Con la ATE quemando sus últimas etapas sin que Meriton encuentre la fórmula para evitar el descalabro, el descarado enfrentamiento de Lim con Ximo Puig ha venido a reafirmar a De Torino en sus pronunciamientos. Para ellos, los políticos valencianos y aunque han tardado más de la cuenta, también tienen que posicionarse en estos momentos tan delicados.

Por eso, al fin y al cabo, Queralt no sólo habló con Ximo Puig sino también con responsables de la Conselleria de la que depende el Protectorado de Fundaciones. Ese también, el del Protectorado, es un punto importante en la hoja de ruta marcada por la oposición a Lim.

No son pocos los que ven en toda esta maniobra con el príncipe el inicio de una desescalada gradual de Lim en el Valencia. Se le preguntaba a Murthy en la puerta de la Generalitat por la llegada del príncipe y el presidente escabullía el bulto respondiendo que Lim se mantiene en su idea de no vender, sin aclarar tampoco mucho más sus palabras. Lo que es evidente es que a Lim el panorama en Valencia se le ha ido oscureciendo en los dos últimos años y los golpes recibidos en la prensa internacional se suman a este escenario nada idílico en Mestalla para el empresario singapurense. Los líos judiciales tampoco ayudan.