Nico González ya está en Valencia y quiere jugar contra el Girona en Mestalla

Nico González (A Coruña, 2002) es el tercer refuerzo del proyecto de Gennaro Gattuso y ya está en Valencia. El canterano del Barça viajó ayer en su vehículo particular y hoy pasará reconocimiento médico para rubricar su contrato de cesión por una temporada, juntándose a Castillejo y Samuel Lino como las llegadas a estas alturas del mercado. El acuerdo entre las tres partes ya se cerró el martes, donde el Valencia no tendrá opción de compra y pagará su ficha, pero restaba un fleco para que la entidad de Laporta diera el visto bueno a la cesión; que el jugador ampliara su contrato que terminaba en 2024 y que tenía una cláusula de 500 millones tras ampliarlo en 2021 (con el peligro que conllevaba que volviera con sólo seis meses de vigencia). Una vez solventado ese trámite, el jugador representado por Jorge Mendes se despidió de sus compañeros en la Ciudad Deportiva del Barça. A su llegada a un céntrico hotel de la ciudad, no descartó jugar el domingo ante el Girona: «Estoy muy feliz, tenía mucha ilusión de llegar y estoy muy contento. Llevaba un par de días con mucha ilusión de poder llegar aquí y tengo muchas ganas de empezar. Espero que pueda tener algunos minutos el domingo. He hablado con Gattuso y me ha dado muy buenas sensaciones».

El centrocampista, de 20 años, tiene físico y visión de juego como para asentarse en el esquema de 4-3-3 del técnico italiano, que se puso en contacto con el gallego para dejarle claro que será importante en sus planes. La llegada de Nico González no cierra la puerta a otro refuerzo en el centro del campo, puesto que la intención de Gattuso es encontrar a un jugador de jerarquía, con Arthur Melo como sueño cada vez más complicado por su alta ficha y la posición de la Juventus que no está dispuesta a ceder en la intención de que el Valencia le pague el 50% de su salario (entre 6 y 7 millones brutos).

La atención del club se va a centrar hoy en que no haya ningún contratiempo en las pruebas médicas de Nico González y en la sede del TAD. El Tribunal de Arbitraje deportivo se va a reunir y será la última oportunidad antes de que arranque la Liga de que sea indulgente con la sanción a Gayà, aunque la única realidad ahora mismo es que la dura sanción de cuatro partidos al de Pedreguer sigue vigente. El castigo se remonta a la pasada temporada tras la resolución tomada por el Comité de Competición por las declaraciones que realizó el capitán después del partido contra el Osasuna de la Jornada 32, muy crítico con la actuación arbitral.

Pese al evidente agravio comparativo con otras acciones similares de declaraciones en caliente –de Iago Aspas o Piqué y que la entidad demostró de forma documental y que quedaron sin sanción– el Comité de Apelación no levantó el castigo de cuatro partidos. Tras ello, el Valencia recurrió el pasado 30 de junio al TAD pero el gran problema es que desde entonces el tribunal no se ha pronunciado con ese expediente pese a que ha seguido teniendo actividad.