El Valencia deja a Bordalás al margen de la planificación

Si Rafa Benítez tuviera que escribir la previa de la intrascendente visita del Valencia al Espanyol a buen seguro que retomaría aquello de 'nos quedan dos partidos para aguantarnos'. Al equipo se le está haciendo muy largo el final de temporada, por poner un objetivo numérico opta a llegar a 50 puntos, y a Bordalás también. El alicantino no esconde su desgaste en cada rueda de prensa monopolizada por su futuro y por los movimientos de mercado, donde cada vez es más evidente que el Valencia, entiendo como decisiones de Meriton, sigue sin contar con su opinión. Ocurrió en la decisión de dar luz verde a la opción de compra de Hugo Duro. Antes de viajar a Barcelona, donde Lato será baja por lesión, se evidenció con el futuro de Guedes. El portugués lleva 44 partidos este curso jugando más de 45 minutos y existe una cláusula en el contrato de compra del PSG en el que si llega a 45 con ese rango el Valencia debe abonar al club francés 5 millones. El luso no entrenó, Bordalás confirmó que fue por molestias pero cuando fue preguntado por esa situación asumió que no tenía todas las variables: «No puedo opinar. Eso lo tienen que preguntar al club porque no puedo pronunciarme de algo que ahora mismo no sé. Si el club ha llegado a un acuerdo con el futbolista y eso tiene que ser así obviamente respetaremos la decisión tanto del club como del jugador, siempre buscando lo mejor para el Valencia. No sé la noticia, me lo han comentado esta mañana. Sí es verdad que el club habló conmigo, no puedo dar más detalles, con el jugador y con su agente y la situación se solventaría buscando lo mejor para el Valencia y para el chico».

Más llamativo fue cuando declaró que «desconocía» la propuesta de sanción de cuatro partidos a Gayà por parte de la Federación hasta que lo comentaron «esta mañana», por ayer, cuando el club había emitido un comunicado el jueves. Varios rodeos para llegar a la conclusión de que en su agenda no aparece ninguna reunión a corto plazo, tiene contrato en vigor para la próxima temporada, para planificar el mercado: «Si hay conversaciones o reuniones eso surge de manera natural porque todos sabemos que es el final del campeonato. Se habla mucho de reunión pero yo no tengo ninguna fecha de reunión, surgirá de manera natural. No estoy ocultando nada y estoy contando la realidad, no hay fecha de ninguna reunión. Además, Miguel Corona está fuera, de viaje, y hablaremos cuando venga».

Con la campaña a punto de finalizar, Bordalás fue claro cuando se le preguntó si considera que ha decepcionado a un sector de la grada, con el Valencia fuera de competiciones europeas por tercer año consecutivo: «Sinceramente, no. Lo he dado todo y estoy tranquilo. Creo que no he decepcionado ni a la afición ni a nadie. En fútbol no le puedes gustar a todo el mundo pero puedo estar tranquilo y creo que la afición es consciente. Nos hubieran gustado mejores resultados, sin duda». Con el ambiente espeso en las oficinas, la tónica de los últimos meses en la relación laboral de Bordalás con Anil Murthy, afronta el Valencia los últimos ocho días de temporada. Se van a hacer eternos puesto que el día a día va a estar marcado por el mismo bucle de falta de sintonía.