Otra vez tensión en torno al Nou Mestalla

Desde el club, para respirar aliviados y aplaudir al leer que Candela, en líneas generales y aún con algún que otro tirón de orejas importante, venía a poner una buena nota al proyecto de ejecución presentado por Fenwick al Ayuntamiento. Un obstáculo menos que salvar, ya que hay que recordar fueron los tres partidos que votaron a favor de las fichas (PP, PSPV y Compromís) los que decidieron que había que encargar una auditoría externa que examinase punto por punto si los planes de Fenwick se ajustaban en tiempo y forma a la realidad para, según la cantidad que arrojase el informe de Vielca, exigir después al Valencia dicho montante como fianza en caso de incumplimiento de los plazos.

Y desde la oposición –no política sino a Peter Lim–, para coger más aire y seguir con las tremendas sospechas que despierta el enrevesado proceso urbanístico que se ha seguido con el estadio y con Meriton. Aunque los ingenieros del colectivo Últimes Vesprades a Mestalla ya estaban prácticamente desde la madrugada de este jueves analizando la entrevista, el primero en abrir fuego públicamente fue Miguel Zorío. El responsable de Marea Valencianista emitió un comunicado en el que apuntaba las dudas del propio auditor al reconocer «que los términos son muy genéricos y difíciles de evaluar». Zorío considera que los plazos de la auditoría –tres meses– se han incumplido y que «los concejales que aprobaron la operación en el pleno de julio son responsables personal y patrimonialmente del cumplimiento del acuerdo en su totalidad».

Los ingenieros de UVA Mestalla admitían después haberse «quedado de piedra» con el escenario que se está dibujando. Ellos fueron los que en aquella charla en el Colegio de Arquitectos (estuvieron presentes Borja Sanjuán y Papi Robles) cosieron a tiros todo el proyecto presentado por el Valencia al Consistorio. «Nos han dado la razón», exponía contundentemente Rafa Rueda, uno de los integrantes de este grupo opositor que en aquella ocasión llevó la voz cantante con sus razonados argumentos. Allí ya se advirtió que aquellos 241 millones que se reflejaban en los cálculos del Valencia iba a quedar desfasados. Con Vicente Candela deslizando que como consecuencia de la dana los precios pueden haberse disparado en torno a un 20-30%, desde UVA Mestalla ven incluso que todos sus pronunciamientos van cumpliéndose. El hecho de que el Valencia, a través del despacho de Fenwick, tuviera que encargar a la empresa MC2 (filial del grupo Typsa) para que recalculara el precio de la estructura del nuevo estadio es una muestra evidente para los integrantes de UVA de todo los errores que se habían cometido en el plan de ejecución presentado. «Todo es irregular», sentencia Rueda, que considera que «las licencias tienen unos condicionantes que no se han cumplido».

Precisamente por este mismo motivo se mantiene cada vez más firme el propósito de acudir en su momento al juzgado. Esa posibilidad, conforme van avanzando las semanas, va cogiendo forma. La advertencia de terminar en litigio judicial ya se dio incluso por escrito al propio Ayuntamiento de Valencia en la carta que este colectivo remitió hace ya algunas semanas. A Peter Lim, y al nuevo presidente, su hijo Kiat, les esperan meses complicados más allá de la cuestión deportiva. No es el único frente que va a tener que solventar Meriton en lo que al TSJ se refiere. Por ahora, eso sí, Lim ha salido airoso de todos los trances que se le han planteado judicialmente.

Avance y polideportivo

Lo de la actividad –por escasa– laboral en el Nou Mestalla empieza a ser ya una cuestión que primero generaba incertidumbre y luego ya cierto cachondeo. El tema de cuántos obreros acuden a diario a Cortes Valencianas es una razón para generar debate. A los aficionados les gustaría ver una mayor actividad, si bien el club siempre ha mantenido que se están cumpliendo fielmente los planes previstos y que hasta mayo no está planificado un aumento de la actividad.

Es más, el Valencia asegura que en cuanto a esos trabajos previos se espera incluso un adelanto de varias semanas en lo que a tabiquería se refiere. En cuanto al polideportivo y el desembolso que tiene que hacer el Valencia en el Ayuntamiento (11,2 millones), se está a la espera, según la versión que se traslada, de que desde el Consistorio se informe de unos detalles del proyecto.