r.d
Jueves, 23 de julio 2020, 23:00
El último en sonar para el Valencia es Míchel González. En un cocktail en el que entren las decisiones impredecibles de Peter Lim y la repentina dimisión del madrileño del banquillo del Pumas, el resultado puede ser perfectamente un contrato para que el exfutbolista blanco entrene al conjunto blanquinegro la próxima temporada.
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Lo cierto es que Míchel cumple con el perfil de conocer el fútbol español, aunque hasta ahora no había entrado en las quinielas. También tiene las manos libres desde este jueves para liderar un nuevo proyecto, que en el caso del Valencia arrancaría en menos de tres semanas (previsiblemeente, el 10 de agosto). Ha sido a raíz de presentar su dimisión del Pumas, algo para nada previsto, cuando la prensa mexicana ha empezado a rascar en las razones reales para marcharse.
"Nos sorprendió, los motivos fueron familiares. La situación nos complica porque estamos a punto de iniciar el torneo Apertura, pero empezaremos con otras personas", ha señalado Jesús Ramírez, presidente del Pumas. La ESPN en México ha precisado que las "razones personales" a las que ha aludido Míchel González para forzar su salida residen en el interés de otro clubes. Uno de ellos, según la cadena, sería el Valencia. El otro, de acuerdo con el mismo canal, el Vancouver de la MLS.
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