Voro: «Ahora duermo menos»

Sin Nico, ni Thierry ni Kluivert. Voro no podrá contar con ellos este jueves en Madrid pero el nuevo entrenador del Valencia, en su octava etapa en el banquillo blanquinegro, ha cumplido con el guion. Voro es una apuesta sobre seguro. Ni una palabra más alta que otra, saltando de charco en charco sin rozarlo. Voro transmite públicamente la misma calma y confianza que siempre. «Por desgracia no es una situación nueva, asumo con la responsabilidad de siempre para desde el trabajo y la responsabilidad que tiene el cargo de ser el entrenador del Valencia, trabajar para mejorar la situación y el equipo cuanto antes salga de esas posiciones que nos hemos acercado, peligrosas».

Pese a que se le ha preguntado por si creía o no en el modelo que tiene el Valencia de funcionar, Voro ha sido prudente. «Desconozco los detalles de si se han querido ir los entrenadores, esas decisiones cada uno tendrá su decisión. Estoy aquí para, si puedo, ayudar al club. No es mi tarea valorar lo que otras personas quieran hacer. ¿El modelo? El año pasado hubo muchas incorporaciones, este verano ha venido un entrenador con incorporaciones ajustadas a un perfil determinado y no han funcionado del todo. El club sí que hizo el año pasado muchos fichajes. No sé hasta qué punto serían con el consentimiento del entrenador. El equipo ha hecho un fútbol vistoso que nos ha dado resultado pero últimamente no ha sido así».

Voro siempre ha considerado que su presencia en el banquillo era un reto al que no estaba destinado. Aún así, nunca ha tenido dudas cuando desde el Valencia le han pedido que dé el paso adelante. «Es una responsabilidad muy grande, si ahora duermo menos, pues duermo menos. No soy un entrenador al uso, cuando acabe esto volveré a mi sitio. Sé dónde estoy y no me preocupa nada en absoluto. Esto no va a ser fácil. El fútbol es de los futbolistas. He estado en ese banquillo, en el 85 en mi debut en el equipo, bajó a Segunda. Era muy joven. Al futbolista se le convence con argumentos que ellos ven».

Confía plenamente en la plantilla que maneja, primero por la calidad que se presume a los jugadores pese a su juventud, y segundo porque el vestuario no está desestructurado como sí se ha producido en otras ocasiones (ha hecho referencia a la etapa post Prandelli). «Por experiencia, en este caso no hay rotura del vestuario que estaba en contra de un entrenador. Ayuda mucho, no hay que reparar nada. He visto todos los partidos, con otras competencias. Les he dicho que necesitamos de su esfuerzo y compromiso y doy un paso al frente, dándoles las herramientas necesarias para mejorar. Tenemos nivel de futbolistas y no me cabe duda que va a haber compromiso y lo mejor es que tenemos veinte partidos por delante. Lo tengo clarísimo».

«¿Qué Valencia se va a ver mañana en el Bernabéu? El equipo ha hecho cosas bien hasta ahora y vamos a aprovecharnos de ese buen trabajo. El objetivo es que el equipo defensivamente tenga más consistencia, que podamos cerrar la portería. Es un equipo que hace goles pero también encaja. Que mejore en esa parcela, es algo necesario para poner la primera piedra».

El optimismo de Voro ha quedado patente desde su primera respuesta. Y también tiene fe absoluta en el apoyo de los aficionados, a pesar del mal ambiente que hay con la propiedad. «Tengo claro que en momentos de dificultad, el aficionado va a estar con el equipo. Pero respeto su decisión. Recuerdo la primera vez, 2007-08, faltaban cinco partidos y estábamos a uno del descenso Jugábamos contra Osasuna y ganamos, y la afición nos llevó en volandas. El siguiente partido fue contra el Zaragoza, bajaron ellos y nosotros no. En aquel momento la afición estuvo al lado del equipo y fue un plus. Estaban Villa, Silva, Mata, Marchena, Baraja, Joaquín, Helguera, Angulo, Albelda, Vicente... aunque estaban apartados. El fútbol es complicado. No puedo pedir nada a la afición».

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