T. CALERO
VALENCIA.
Viernes, 9 de marzo 2018, 01:15
Pablo Longoria, el nuevo director del Área Técnica, lleva unos días siguiendo de cerca y tomando el pulso al primer equipo del Valencia en la ciudad deportiva de Paterna. Desde mucho antes Mateo Alemany, junto a Vicente Rodríguez y Marcelino, cavilan sobre la construcción de la plantilla para la próxima temporada. Un grupo que, si la cosa no se tuerce en esta recta final de campeonato, jugará la Champions League en la 2018-2019. Con menos armas -económicas- que la gran mayoría de sus competidores, para el Valencia es fundamental ir adelantando los deberes y por ello, entre otras convicciones, se tomó la decisión de pagarle al Inter -antes del 31 de mayo- los 25 millones de euros que cuesta quedarse en propiedad a Geoffrey Kondogbia.
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Es una cantidad que el Valencia considera justa por el rendimiento que está dando el francés (25 años) y un dinero que se va al lado rojo dentro de las cuentas del club de Mestalla. Tanto Alemany como el grupo de trabajo que ya lidera Longoria saben de sobra que es necesario vender futbolistas por 45 millones de euros y la delantera aparece como la zona dónde más revalorizados están sus futbolistas: tanto Simone Zaza, como Santi Mina y Rodrigo Moreno han elevado su caché desde el inicio del curso y juntos acumulan una cotización de mercado de más de setenta millones. Cabe recordar que el Valencia es el único equipo de la Liga en el que sus tres delanteros están con diez goles (Rodrigo) o más, puesto que Mina y Zaza acumulan once por cabeza.
El Valencia puede aprovechar en verano la buena temporada de sus tres hombres de ataque para hacer caja y equilibrar el presupuesto del club. Hay dinero en los delanteros. Simone Zaza arrancó el curso con una valoración (según la página especializada 'CIES Football') de 12,8 millones y ahora mismo vale 31. Para 'Transfermarkt', el italiano ha pasado de 15 a 25. Zaza, que recuperó el gol ante el Betis después de casi tres meses sin ver portería, costó 16 millones más otros dos en variables y firmó un contrato hasta 2021.
De los tres, quizás la 'recuperación' más sorprendente sea la de Santi Mina. El gallego respondía como suplente cuando Zaza y Rodrigo eran inamovibles para Marcelino y en las últimas semanas se ganó un hueco en el once hasta caer lesionado. Santi Mina también ha doblado su cartel en el mercado hasta llegar a los 20,4 millones (en enero, desde entonces ha hecho seis goles más) y con sólo 22 años, vuelve a ser un delantero con nombre tras dos temporadas complicadas en el Valencia, club al que aterrizó por 10 millones. Rodrigo, en principio, es el que menos opciones tiene de salir por el rango adquirido en el vestuario y el jugo que ha sabido extraerle Marcelino. Al hispano-brasileño, con muchas posibilidades de estar en el Mundial, se le valora actualmente en torno a 25 millones. En junio de 2017, Rodrigo no alcanzaba los diez (7,5 para Transfermarkt, 9,8 en CIES Football).
Además de los delanteros, hay otro futbolista vital para entender el equilibrio presupuestario: Joao Cancelo. Para el Valencia supondría un gran desahogo que el Inter pagara la opción de compra del luso, cifrada en algo más de 35 millones. Espera el club que la Lazio haga lo propio con Nani, porque el extremo no dio el rendimiento esperado y era uno de los mejores pagados.
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