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R. X.
Albaida
Martes, 15 de junio 2021, 15:00
La asociación Memorial Democrático de la Vall d'Albaida junto con los ayuntamientos de Albaida y Benigànim, realizaron un íntimo homenaje en memoria de dieciocho personas asesinadas el 10 y 16 de junio de 1939, por la represión franquista y que fueron lanzadas a una fosa común en el cementerio de Albaida. Ocho eran vecinos de esta localidad y diez de Benigànim.
Esta historia tan sólo unos pocos saben y muy tímidamente hablan, ya que fue un hecho que aterrorizó todo un pueblo y bajo el temor de sufrir posibles represalias callar.
El acto comenzó con la visita del lugar donde los asesinatos fueron fusilados, que se encuentra en una de las paredes exteriores del cementerio. Esta información ha sido posible gracias a diferentes testigos, vecinos del municipio. En el mismo lugar, la nieta de una de las víctimas, depositó un ramo con dieciocho claveles blancos uno por cada uno de los fusilados.
Los participantes hicieron el mismo recorrido que los cuerpos sin vida de los asesinados hasta la fosa. Ante la misma, sin lápida o identificación, tan sólo está delimitada desde el 29 de noviembre de 2020, se mencionaron a cada una de las víctimas.
Los representantes de los ayuntamientos dejaron dos coronas de flores encima de la fosa, demostrando su compromiso para recuperar la memoria y la dignidad, de los que un día fueron vecinos de los respectivos pueblos.
La alcaldesa Benigànim, Amparo Canals, y el concejal de Memoria Democrática de Albaida, Alejandro Quilis, dijeron unas palabras relacionadas con la tarea de búsqueda de familiares e información que se está realizando, para llevar a cabo el proyecto de localización, exhumación e identificación, y la satisfacción de poder enterrar dignamente a los restos de las víctimas con sus familiares.
Gracias a los responsables del cementerio, la funeraria Funepont, durante el acto pudo estar encima de la fosa un socarrat con la identificación de los asesinados, que fue depositado el 29 de noviembre de 2020, el mismo día de la presentación del libro 'Albaida 1931-1949. República, revolución social y represión franquista', pero que poco después desapareció.
Se da la circunstancia de que antes de este homenaje, para sorpresa de los responsables del cementerio, fue encontraron roto dentro de un nicho vacío y lo reconstruyeron.
El homenaje acabó con la lectura del mismo autor Miquel Mollà miembro de Memorial Democrático y familiar de uno de los miles de fusilados en Paterna, una poesía dedicada a todas las víctimas asesinadas por la represión franquista.
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