McDonald's cerrará su servicio de 'McAuto' en Alcoi para cumplir una sentencia de 2016

La conocida franquicia de comida rápida McDonald's está a punto de perder una de las principales fuentes de ingresos en su establecimiento de Alcoi. Después de un largo periplo judicial, la firma estadounidense deberá suspender a partir del próximo 15 de marzo su servicio de recogida por ventanilla para automóviles (conocido popularmente como 'McAuto'). La medida se hará efectiva seis años después de que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) estimara el recurso contencioso-administrativo interpuesto por la Colla Ecologista La Carrasca-Ecologistes en Acció.

Este recurso era un paso más en la 'cruzada' de los ecologistas, que desde 2006 venían denunciando la irregular cesión de terrenos en una zona verde que el Ayuntamiento le había hecho a la cadena americana. Además de suspender el servicio de ‘McAuto’, la sentencia también se pronuncia sobre la zona de estacionamiento que se habilitó junto al restaurante, que hasta el momento era de uso privativo de la multinacional, y que a partir de ahora pasará a ser de uso público.

La sentencia es firme desde noviembre del pasado año, y a pesar de los intentos de la empresa por demorar su cumplimiento, el consistorio ha determinado el día 15 de marzo como fecha límite para que se inicie la ejecución. La concejala de Régimen Jurídico, Lorena Zamorano, asegura que si la firma estadounidense no actúa, lo hará el Consistorio de forma subsidiaria.

Tal y como determina el fallo del tribunal, se deberá “restringir de forma completa el acceso de vehículos” al carril del ‘McAuto’, algo que se podría materializar “mediante la colocación de elementos como por ejemplo: bolardos, jardineras, bancos, barreras de hormigón tipo new jersey, etc.”. “La actuación no requiere de un gran despliegue de medios, así que no hay razón para que la empresa lo dilate mucho más. Si en cuestión de un mes no cumplen el dictamen de la justicia, el Ayuntamiento actuará de manera subsidiaria”, asegura Zamorano.

El espacio total que se liberará será de 1.246 metros cuadrados, cerca de la mitad de la superficie que se concedió a McDonald's en 2007 para que se estableciera en Alcoi. La Carrasca denunció por aquel entonces que se había permitido ocupar una superficie de la zona verde “cinco veces superior a la que podía utilizar legalmente; un 27,92%, en vez de un 4,5%”.

Para proceder a la concesión, el gobierno local de la época (en manos del Partido Popular) tuvo que modificar los artículos del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alcoi referentes a zonas verdes. Puesto que la normativa urbanística valenciana no permite que se habiliten aparcamientos en zona verde sin antes haber recalificado el terreno, el cambio en el PGOU alcoyano introdujo el criterio de la rasante. Con esa modificación se permitía habilitar aparcamientos en zonas verdes, siempre que fuera por debajo de la rasante.

En este punto es donde difiere el criterio del Consistorio respecto al de La Carrasca y formaciones políticas como Guanyar Alcoi. Pablo González, concejal de esta formación municipalista, considera que más allá de liberar el espacio público del párquing, este debería ser subterráneo. “Entendíamos que la sentencia pedía que se impidiera la circulación viaria al aparcamiento, ya que no era compatible con una zona verde, para la cual se debía restaurar el espacio”.

Esta interpretación entra en conflicto con la que hacen los técnicos municipales, quienes estiman que la rasante toma como referencia los viales adyacentes al establecimiento, y no la zona verde en sí. Como se da la circunstancia que el restaurante está en una zona con ligera pendiente, una de calles aledañas está a mayor altura que el párquing, por lo que a tenor del Ayuntamiento se estaría respetando la normativa urbanística.

Para Júlia Moltó, integrante de La Carrasca, esta postura supone una “interpretación fraudulenta de la sentencia”, y asegura además que no hay ningún informe municipal que justifique la idoneidad de una zona de aparcamiento en esa ubicación. Moltó considera que para cumplir correctamente con la sentencia se debería impedir el acceso de vehículos a la zona, dotándola a su vez de recursos públicos como un parque infantil o zonas de ejercicio. La Carrasca ha llevado la causa al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, quien, tras resolver unas cuestiones previas de procedimiento formal, deberá pronunciarse sobre la posible reconversión del párquing.

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