«Hay que aconsejar a los más jóvenes, pero sin hundirles»

El madrileño esta disfrutando este año de su tercera etapa en el Lucentum, tras haber jugado en ACB (2002-2004) y en EBA con el filial del equipo. Es el jugador más veterano del equipo, no solo por la edad (32 años), sino porque es de los pocos jugadores que pueden presumir de haber jugado en todas las categorías del baloncesto español, además de ser campeón de Europa junior junto a Calderón, Gasol, Reyes o Navarro. Tras tres años apartado de la competición, no dudó en regresar a un club al que le tiene «especial cariño», convencido de que le puede ayudar a «regresar donde merece».

- Han terminado la primera fase con 21 triunfos en 22 partidos, ¿esperaban ser tan superiores?

- Nunca se sabe lo que te espera, y más siendo un equipo joven y en una categoría nueva. Aunque conociendo al grupo esperas estar en la parte alta, pero no ganar con facilidad. Hemos entrenado muy bien con Kuko y los jóvenes han dado el máximo, y esa primera plaza es la recompensa.

- Esta es su tercera etapa en Alicante, ¿por qué decide regresar?

- He estado tres años casi retirado. Iba algunos días a entrenar con el Guardamar y tenía mono de jugar y sobre todo de competir. Trabajo y vivo en Alicante y quería compaginar el baloncesto con eso. Llegó la nueva directiva con expectativas de subir, de empezar de cero con alguien que conocieran los aficionados y me sedujo la idea de ayudar a un equipo al que le tengo especial cariño, y por el que haría lo que me pidieran. Todos intentamos aportar lo que tenemos para que el Lucentum sea el que ha sido.

- ¿Qué le parece el nuevo proyecto?

- Los que han llegado han hecho lo que les ha tocado. Sin dinero y con muchas deudas, esto era lo mejor, porque quedarse en LEB era un proyecto de poco futuro. Los han tenido bien puestos para hacerse cargo del club tal y como estaba. Se empieza de cero, y ahora toca crear afición, porque es muy duro pasar de LEB a Primera Nacional. Agradezco a todos los que vienen a vernos en cada partido y en especial a la 'Kali Nord'.

- ¿Cree que la entidad puede regresar a la élite en un futuro?

- El club irá ascendiendo poco a poco si hay dinero. Todo depende de las instituciones y de las empresas privadas, porque son las que tienen que poner el dinero. La ciudad y la afición merece tener un equipo al menos en LEB y ojalá sea en ACB. Pero no hay que caer en el mismo error, tiene que ser poco a poco y en un futuro no muy cercano. Por mi sería el año que viene, pero primero hay que saldar las deudas, y encontrar un patrocinador, que al final aparecerá. Este año las cosas se están haciendo bien y si se sigue así se volverá a estar arriba.

- ¿Pesa mucho ser el más veterano de la plantilla?

- No, aunque no es fácil sobre todo a la hora de entrenar. Me he adaptado perfectamente, nos llevamos todos muy bien, los chavales son encantadores.

- ¿Le da consejos a los más jóvenes?

- Me ficharon para aportar veteranía y experiencia al equipo. Les grito mucho en la pista y la directiva me dice que lo hago poco. Hay que dar consejos y corregirles, pero no hundirlos, a veces es mejor que ellos mismos se den cuentan de sus errores. Saben que estoy para lo que necesiten.

- ¿Cómo es el ambiente dentro del vestuario?

- La gente es muy agradable. En los equipos siempre hay alguien raro, pero este año estamos todos encantados y nadie tiene un mal rollo con nadie. Nos ayudamos mucho y el buen rollo se acaba notando también en la pista. Cuando las cosas van bien en lo deportivo, siempre es más fácil.

- ¿Es el Lucentum el gran favorito para conseguir la plaza EBA?

- No, para mi es l'Alfàs, porque tiene mucha más experiencia, además de gente con mucha calidad. A partir de ahora van a ser partidos muy complicados, y en la fase final te lo juegas todo a un partido. Cada planteamiento será diferente, y todos los equipos vamos a ir con el cuchillo entre los dientes.

- ¿Habla el vestuario del ascenso?

- De fuera nos hablan mucho de ello, pero dentro aún no se habla de eso. La derrota ante l'Alfàs nos vino muy bien, porque nos dimos cuenta de que no era todo tan fácil, de que nos podían ganar. Hay que ir paso a paso. Ahora vamos a centrarnos en esta fase, en La Vila y El Pilar, y lucharemos por las semifinales, después ya tocará pensar en el resto. Ahora empieza lo importante y lo más duro.

- ¿Siente que las lesiones han marcado su carrera?

- He tenido muy mala suerte con las lesiones. Me lesioné el tendón de Aquiles y me impidió ir al Mundial Júnior. Después me rompí la rodilla en LEB cuando estaba muy bien. Cuando debí explotar me encontré con las lesiones, pero ya no pienso en eso, ahora disfruto mucho con lo que hago.

- Ganó el europeo júnior de Varna (1998) con Calderón, Navarro, Reyes y Gasol, entre otros, ¿recuerda aquel momento con nostalgia?

- Fue una gran época y la recuerdo con mucha alegría. También con un poco de pena, porque ellos han llegado arriba y yo no pude. Pero ya no me quitan que jugué con ellos y que fui campeón de Europa. Cuando voy a casa miro con alegría la medalla.

- ¿Con qué otra actividad compagina el baloncesto?

- Soy asesor fiscal y hace unos años monté una asesoría (JR asesores). Estudié empresariales y ADE en la Universidad de Alicante. He estado estos años sin jugar porque las ofertas venían de fuera y no me quería ir. A los jóvenes hay que explicarles que dejar los estudios te puede traer muchos problemas, porque al final te tienes que buscar la vida cuando termina el baloncesto.

- ¿Qué sueño le queda por cumplir a López Valera?

- Que el Lucentum vuelva a estar en la categoría que merece, y se va a cumplir. En el tema empresarial soy muy ambicioso, y quisiera tener una gran empresa, una multinacional.