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XABIER GALARTZA
Domingo, 2 de noviembre 2014, 00:05
Cuando menos se esperaba llegó el imprevisto revés del Bera Bera, que cayó claramente frente a un Elche Mustang que parece reivindicar su antiguo estatus después de un incierto inicio liguero que le había llevado a alojarse en una zona baja, a la que no estaba acostumbrado, al haber acumulado hasta ayer cuatro derrotas y dos victorias. Hasta la fecha y después de quince enfrentamientos en Donostia, el Elche nunca había sido capaz de doblegar al cuadro donostiarra.
La primera y más rápida consecuencia de este revés es la pérdida del liderato, además de la de condición de invicto, tras confirmarse el triunfo de su máximo rival Rocasa sobre el también temible Mecalia Guardés, es decir, el siguiente equipo que visitará Bidebieta después de jugar la próxima semana en Valladolid contra el emergente Aula Cultural.
La afición donostiarra no está acostumbrada a ver perder a su equipo en la competición doméstica. La última vez que se vivió un episodio similar fue hace más de dos años (31 de enero de 2012) frente al entonces invencible Itxako. Aquella derrota por la mínima (26-27) sirvió para confirmar el triunfo liguero del equipo navarro en una temporada en la que el Bera Bera fue subcampeón. Desde entonces había acumulado 35 victorias consecutivas en casa consecutivas.
En este duelo se acentuaron puntualmente los defectos que la plantilla trata de limar desde el inicio de la temporada, como es la mejora del rendimiento ofensivo. En esta oportunidad se topó con grandes dificultades para tratar de superar la defensa abierta y presionante del Elche Mustang. No encontraron la fórmula de perforar una portería rival que estuvo brillantemente defendida por su guardameta Miriam Sempere.
El arranque del partido fue más que esperanzador. El equipo saltó a la cancha muy centrado, lo que cogió de sorpresa a un Elche que se vio perdiendo por 4-0 en un abrir y cerrar de ojos. Luego llegó la reacción de las levantinas a través del efectivo trabajo de su primera línea formada por Marizza, Musons y la ex jugadora del Bera Bera Dunay, quienes lograron abrir espacios en la defensa donostiarra. El Elche ha sido el equipo que mejor ha sabido frenar al Bera Bera, teniendo en cuenta que las donostiarras llegaron a encajar un parcial de 0-7, después de superar una sequía goleadora de casi un cuarto de hora.
Las pérdidas de balón acumuladas incidieron sensiblemente en el rendimiento de las jugadoras y también en su moral, viendo que a medida que transcurrían los minutos no se veían capaces de dar la vuelta a la situación. Además, la defensa de Elche se empleó con dureza.
Ahora, Bera Bera acumula 12 puntos y el Elche CF Mustang 6. Puede ser un punto de inflexión para visualizar a las franjiverdes en una posición mucho más alta en la tabla clasificatoria.
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