Bernat Sirvent
Martes, 13 de enero 2015, 01:00
La radiografía pueblo a pueblo del mercado laboral alicantino revela que el drama del paro sigue afectando a demasiadas familias, pero cada vez menos. De hecho, solo en once de los 141 municipios que tiene la provincia repuntó el desempleo el pasado año, justo en la mitad de pueblos que en 2013, cuando creció en veinte. Además, el aumento es más que testimonial en municipios que tienen, por lo demás, escasa población por no decir nula explosión demográfica.
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Así, Benidoleig, con 81 parados en situación de demandantes de empleo a 31 de diciembre, es el municipio que registra mayor repunte del desempleo: quince personas más buscan activamente un trabajo. Le siguen, en orden descendente, Agost, que suma 539 desempleados en total, once más en el último año recién despedido. A continuación, Vall de Gallinera, con 41 parados y ocho más; Beniardá, con diez parados y cuatro más; Famorca con cinco parados y tres más; Benimarfull con 41 parados y tres más; Almudaina con siete y tres más; Guadalest con ocho y dos más; Gorga con 26 y dos más; Balones dieciocho y dos y Adsubia 25 y uno.
Es decir, se trata de municipios más que despoblados de la Marina Baja, Marina Alta y El Comtat, en las zonas rurales del interior más profundo de Alicante, donde no hay prácticamente otra alternativa laboral que el campo y, de modo excepcional, la construcción. Salvo el caso de Agost, un municipio importante de l'Alacantí con una pujante industria cerámica, el resto de municipios donde hay más parados que en 2013 son de zonas rurales con escasa alternativa para trabajar, salvo el turismo de interior o actividades vinculadas con él.
Otros cuatro municipios, Agres, Millena, La Romana y Benimeli, registran un valor cero, es decir, ni sube ni baja el paro en 2014.
Aunque de manera también testimonial y pese a su estrecha y única dependencia del sector agrícola de secano, reducen un parado en el último año pueblos como Vall d'Ebo, parcent, Murla, Llíber, Tollos (el más pequeño de la provincia y que ha logrado diversificar su actividad con un centro de atención para personas mayores) y Benimasot. Entre dos y tres parados menos acumulan Torremanzanas, Benifato, Ondara, Penáguila, Benasau, Alfafara, Alcoleja, Vall d'Alcalà, Sanet i Negrals y Benillup.
Benidorm sin empleo
Llegado al grupo de municipios con cuatro parados menos (Sagra, Tárbena y Benidorm), llama poderosamente la atención la capital turística por excelencia de la Costa Blanca. Pese a sus 40.000 plazas hoteleras y ser destino de sol y playa preferente en España y en todo el Mediterráneo, Benidorm solo reduce cuatro parados y mantiene una bolsa de desempleo de 7.025 personas. No es la primera vez que esta enorme disfunción del mercado laboral viene recogida en el informe de la Conselleria de Empleo. En el lado contrario, Elche, la cuna del calzado de caballero y señora y del deportivo o tiempo libre, se consolida como el auténtico motor del empleo en la provincia. Pese a acumular 31.823 parados, reduce el guarismo en 2.607 en 2014, medio millar más que Alicante, que es la capital (suma 36.419 desempleados, 2.073 menos). En Alcoy hay 584 parados menos, en Elda 570 menos, en Petrer 391, en San Vicente 467, en Torrevieja 624, en Villena 443, en Orihuela 657 y en Crevillent 429. Baja en las nueve comarcas alicantinas.
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