Los difusores recobran la riqueza marina en torno a las desalinizadoras

La utilización de difusores en el extremo de los emisarios de salmuera de las plantas desalinizadoras permite recuperar la riqueza y diversidad marina del entorno, según las conclusiones de un estudio del departamento de Ciencias del Mar y Biología Aplicada de la Universidad de Alicante (UA).

Ese trabajo científico ha sido publicado en la revista especializada "Water Research" tras el análisis durante ocho años de los posibles efectos de los vertidos de la desalinizadora de San Pedro del Pinatar, ha informado el investigador principal, José Luis Sánchez Lizaso.

Si el vertido llega a producir impacto sobre los organismos que habitan en el fondo marino puede ser reversible ya que los biólogos de la UA han concluido que la colocación de estos difusores (una pieza mecánica) aumenta la mezcla de la salmuera con el agua marina y evita los posibles impactos sobre el medio.

En el caso de San Pedro del Pinatar, en funcionamiento desde 2006, la salida del emisario submarino de la salmuera (una tubería de 1,293 metros de diámetro) se colocó sobre el lecho marino a una profundidad de 33 metros y a gran distancia de la costa (5 kilómetros) para evitar que afectara a las praderas de Posidonia oceanica.

Pese a no afectar a la flora, en este punto de vertido se observó una reducción de la fauna del lecho marino debido a que el chorro de salmuera impactaba directamente en el fondo.

En 2010 se instaló un difusor que elevaba el referido chorro, lo que ayudó a que se mezclara rápidamente con el agua de mar y minimizó la afección.

De esta manera, el estudio refleja que la salinidad en el punto más próximo al vertido se redujo de 49 a 38,5 gramos por litro, lo que permitió regresar a las comunidades marinas a un estado similar al existente antes de la desalinizadora.

Este proceso de regeneración se produjo, además, relativamente rápido ya que fue culminado en el plazo de varios meses y no de años.

Los investigadores aconsejan adoptar esta sencilla medida correctora de instalación de difusores durante la construcción de las plantas o, incluso como en el caso de San Pedro, una vez puesta en funcionamiento.

También se ha visto la efectividad de otras medidas para aumentar la mezcla del agua vertida como la dilución con agua de mar que se aplica en las desalinizadoras de Jávea y Alicante .

Se calcula que la producción de agua desalinizada dirigida a aliviar la carestía para el consumo humano se sitúa en 24,5 millones de metros cúbicos por día, de los cuales unos 4,2 se circunscriben a las orillas del mar Mediterráneo (17 por ciento de la producción mundial).

Según se pone de manifiesto en el informe, España es una de las principales potencias en este campo al acaparar el 7 por ciento de capacidad mundial, con siete de cada diez de sus plantas en las comunidades autónomas situadas en la orilla mediterránea.

La de San Pedro del Pinatar tiene una capacidad de producción de 130.000 metros cúbicos diarios.

Junto a Sánchez Lizaso, han trabajado en el estudio los miembros de la UA Yoana Del Pilar Ruso, Elena Martínez García, Francisca Giménez Casalduero, Ángel Loya Fernández, Luis Miguel Ferrero Vicente, Candela Marco Méndez y José Antonio de la Ossa Carretero.

El trabajo sobre la planta murciana se enmarca dentro del programa de vigilancia ambiental que desarrolla la UA a petición de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, que permite comprobar si se produce algún tipo de impacto ambiental para, si se detecta como ha sido el caso, corregirlo con el fin de que la desalinización no suponga una mayor presión sobre el medio marino.