F. R.
Domingo, 6 de diciembre 2015, 00:53
Como ocurre desde hace varios años en La Mata, el encierro infantil de San Fermín, también resultó un éxito por las proincipales arterias del centro urbano, con una gran participación de niños y jóvenes en este acto festivo que se preparó en la calle Maestro Vallejos, a la espalda de la Iglesia de la Inmaculada.
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Los niños, ataviados de blanco y con el pañuelo rojo pamplonica, realizaron todo el ritual, con el periódico en la mano, los cantos dirigidos esta vez a la patrona, y después corrieron alegres por delante de seis grandes toros hinchables, que llenaron las calles camino de la plaza que también se montó en el céntrico Paseo de Vista Alegre, donde la diversión taurina sin peligo se prolongó después. Tres chupinazos dieron el aviso de la salida de los astados de pega y el sonido de la pólvora, prácticamente inexistente durante estas fiestas, alertó a los muchos participantes en este encierro, para comenzar sus carreras por la calle Maldonado, Ramón Gallud y Concepción para llegar hasta el paseo.
Al bullicio que se vivió por la mañana en las calles de alrededor de la Iglesia de la Inmaculada, se sumó la charanga de una despedida de soltera, así como en la calle Concepción también se realizó la habitual línea solidaria de monedas organizada por las catequesis de La Inmaculada, a beneficio de Cáritas Parroquial. La fiesta se respiraba por todas partes y el colofón fue la salida de la popular Charamita con los gigantes y cabezudos.
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