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C. M. A.
Domingo, 3 de julio 2016, 00:33
Con temperaturas por encima de los treinta grados centígrados y un buen estado de la mar las playas de Torrevieja colgaron ayer la bandera roja que prohibe el baño, ante la ausencia todavía de contrato para la prestación del servicio de socorrismo y salvamento que debía haberse iniciado el pasado 15 de junio.
No obstante el distintivo que prohibe el baño tiene más sentido durante la jornada de hoy domingo del que tuvo el ayer, cuando se izó en todo el litoral salinero con un mar en calma. Hoy el viento de levante complica la situación pese a que miles de bañistas se han acercado hasta las playas para disfrutar de ellas, sobre todo aquellos que acaban de llegar para pasar sus vacaciones en la primera gran oleada de turistas que recibe la ciudad.
El resultado de esta medida en el primer fin de semana fuerte de turismo del año, cuando miles de personas acuden al municipio a pasar sus vacaciones, y por tanto a sus playas, fue de sorpresa y en muchos casos de indignación por el hecho de que no se tuviera en cuenta a esos turistas. El Partido Popular incendió las redes sociales con imágenes de todos los rincones en los que ondeó la bandera roja, una medida que por otra parte no tuvieron en cuenta las personas que como cada fin de semana desde hace ya varios, llenan las playas de Torrevieja, si bien quienes se metieran en el agua debían saber que el baño estaba prohibido.
Esta es la consecuencia de los últimos sucesos ocurridos en las playas esta misma semana: un turista sueco falleció en La Mata el pasado miércoles, una playa que como, el resto, se encuentra sin bandera adecuada ni socorristas.
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