Puig asegura que es el 'president' de la Generalitat que más visita Alicante

El president de la Generalitat, Ximo Puig, se sometió ayer por la tarde durante una hora y cuarto a las preguntas de decenas de ciudadanos, a los que explicó las prioridades de su gobierno y los principales cambios efectuados en su primer año de mandato. De esta forma, Puig abrió los encuentros de los miembros del Consell con los ciudadanos en el foro de transparencia 'Diàlegs d'Estiu', impulsados por la Conselleria de Transparencia y pioneros, los cuales se desarrollan desde ayer y hasta el viernes en la Sede Ciudad de Alicante de la Universidad alicantina (UA).

Un centenar de personas abarrotaron la sala dispuesta por la UA para formular sus preguntas a través de una moderadora, con el único requisito previo de inscribirse en una web de la Generalitat para organizar el aforo limitado. Uno de los argumentos que repitió en sus respuestas es la deficiente financiación autonómica -«estamos profundamente discriminados»- y abogó por trabajar por acabar con la «invisibilidad de nuestra situación en España».

Pese a esta difícil situación económica, destacó el esfuerzo del Consell en las actuaciones más urgentes, entre las que citó el centro de salud del Rabaloche de Orihuela.

A Puig le preguntaron por multitud de cuestiones, algunas generales de la autonomía y otras más locales, por ejemplo por la política turística, sobre lo que dijo que Benidorm «es el pilar fundamental de la política turística» de su gobierno, mientras que sobre vivienda destacó que se han retomado las ayudas.

También le cuestionaron por los consellers alicantinos del Gobierno valenciano, a lo que comentó que «hay que gobernar para toda la Comunitat» y que el diseño de un equipo al frente de la Generalitat resulta complicado.

De agua dijo que se ha hecho «muchísima demagogia» y pidió a los partidos «no jugar con este tema» porque «hubo quien prometió todo y quien llevó a guerras que no condujeron a nada». Afirmó que defenderá la llegada del agua del trasvase del Tajo al Segura con el argumento de que el Consell no renuncia a lo que «corresponde» a la Comunitat, y también añadió que hay que buscar «soluciones para siempre» en materia hídrica combinando las distintas formas de obtención de este recurso.

En este sentido, afirmó que si el Gobierno central permitiera poner a pleno funcionamiento la desalinizadora de Torrevieja, habría más agua que la que llega por el trasvase desde los pantanos de Entrepeñas y Buendía, aunque aclaró que esto no significa que vaya a dejar de defender la transferencia desde el Tajo.

De RTVV, recordó que el PP es el responsable del despilfarro de 1.200 millones de euros en el ente público, y añadió que ahora «la gran noticia» es que todos los partidos han pactado la creación de una nueva televisión autonómica.

Además de este acuerdo en torno a RTVV, valoró las recientes conclusiones de la comisión parlamentaria en torno al accidente de metro de Valencia y dijo que las mismas suponen la «reparación» de una situación creada por el anterior Consell.

Otros de los asuntos que suscitaron el interés de los asistentes fue la delicada situación de la patronal provincial, sobre lo que Puig dijo que tiene «el máximo respeto» por las organizaciones empresariales y añadió que está por ver si se puede salir adelante, mientras que sus consellers mantienen contactos para avanzar en una solución. Sobre la vertebración territorial, Puig dijo que es el president que más visita la provincia de Alicante.

El jefe del Consell estuvo acompañado por el rector de la UA, Manuel Palomar, y el alcalde alicantino, el también socialista Gabriel Echávarri, así como el conseller de Transparencia, promotor de la iniciativa, Manuel Alcaraz, entre otros muchos.