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ALICANTE
Martes, 6 de abril 2021, 19:13
La amenaza de un posible cambio en las reglas de explotación del Tajo-Segura mantiene en jaque a los agricultores del sur de Alicante porque de llevarse a cabo se reducirían los envíos de agua mensuales a esta provincia. Hoy el presidente de la Diputación, Carlos Mazón, ha vuelto a criticar lo que a su juicio es un «cuchillazo» al trasvase. «No vamos a tolerar que la huerta de Europa se convierta en un desierto», ha manifestado. El Consell también se opone, pero decidirá el Gobierno.
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Mazón ha realizado estas declaraciones en su visita este martes a Albatera, donde ha acudido junto a la presidenta del PPCV, Isabel Bonig. "Estamos con los regantes, con los murcianos y los almerienses, con la economía y la industria de la Vega Baja", ha manifestado. En este sentido ha advertido que van a secundar todos los movimientos y movilizaciones que planean los agricultores para defender la llegada de agua al sureste peninsular. "Tenemos los recursos jurídicos preparados a través de la Mesa Provincial del Agua para dar esta batalla con todas las consecuencias", ha advertido.
El Instituto de Estudios Económicos de Alicante (INECA) ha presentado un informe reciente en el que señala que esta medida afectaría 45.000 empleos en esta provincia que dependen del sector agrario y de la industria agroalimentaria.
Las nuevas reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura que propone el Ministerio de Transición Ecológica suponen en la práctica pasar de 38 a 27 hectómetros cúbicos al mes para la provincia de Alicante.
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