El primer fin de semana de 'tardeo' deja más de 300 multas en Alicante

No se puede calificar de tranquilo el fin de semana en el que ha regresado el 'tardeo' a las zonas de ocio de Alicante. El retraso del horario de cierre en el sector hostelero ha dejado las terrazas repletas de gente en el centro y en las playas. Pero también más de 300 multas a ciudadanos por incumplir las normas. La mayoría de locales sí cumplieron y sólo diez de los cientos de establecimientos que están abiertos en la capital alicantina fueron propuestos para sanción por no respetar horarios o aforos. Una vez más, el botellón, las fiestas en viviendas y los desplazamientos tras el cierre de bares y restaurantes centraron la mayor parte de la actividad policial.

Según ha informado este lunes la Concejalía de Seguridad, el despliegue durante el fin de semana de la Policía Local se salda con 305 denuncias por desobediencia de las normas sanitarias en vigor para hacer frente al coronavirus. La mayoría de ellas, por no usar mascarilla (92 actas), por no respetar el toque de queda (80) o por hacer botellón (61).

Los agentes desalojaron 29 fiestas en viviendas y localizaron varios botellones en La Ereta, en los castillo de Santa Bárbara y San Fernando o en las calas del Cabo de la Huerta. La Policía Local también destaca que se han incrementado las denuncias por movilidad después del toque de queda en los últimos días.

Durante la tarde del sábado quedaron cerrados los accesos a la calle Cataños por el exceso de gente. Desde la Asociación de Vecinos del Centro Tradicional, su presidenta Alcázar Moreno señala hoy que también ha aumentado el nivel de ruido y, por tanto, las molestias a los residentes de esta zona de Alicante.

El concejal de Seguridad, José Ramón González, ha pedido hoy responsabilidad a la ciudadanía y ha insistido en evitar las celebraciones en grupo.