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Muchas personas han aprendido a cómo actuar, por ejemplo, cuando alguien se ha atragantado o se está ahogando. Nunca se sabe cuándo se puede tener ... que echar mano de ese conocimiento. Haciendo una analogía con el tráfico y la conducción, una de las situaciones más peligrosas que pueden producirse es encontrarse o detectar que un conductor está circulando en dirección contraria, ya sea de manera voluntaria o por un descuido. ¿Cómo se debe actuar en ese caso? Hay varios aspectos que se deben intentar cumplir para que los efectos de esta acción sean los menos posibles según recomiendan desde la Guardia Civil.
Circular siempre por la derecha
Cuando circulamos por una autovía de varios carriles y no hay mucho tráfico, son muchos los conductores que tienen la intención ir por el carril central o incluso por el de la izquierda. Este modo de actuar, que puede ser sancionado por la Guardia Civil, es incorrecto y agrava la posibilidad de sufrir un choque si el vehículo que circula de manera incorrecta por su derecha no nos ve al haber una curva. Siempre, por lo tanto, recuerdan desde la Guardia Civil, hay que circular por el carril de la derecha salvo para efectuar un adelantamiento. Y una vez que éste se efectúe, volver a la derecha.
Avisar al conductor
O bien mediante las luces o con el claxon, hay que hacer ver al conductor que circula de manera incorrecta que su acción es peligrosa y puede causar un accidente.
Llamar al 112
De una manera que no se ponga en riesgo el propio conductor al efectuar la llamada, hay que avisar al 112 cuanto antes. Hay que ser lo más claro y conciso posible y ofrecer, de manera tranquila y comprensible, la máxima información: en qué vía y punto kilométrico o al menos alguna referencia como la salida más cercana, color y marca del vehículo que circula en dirección contraria si se puede apreciar y cualquier otra información que se considere interesante.
No efectuar maniobras bruscas
Aunque se está viviendo una situación de riesgo, lo que no se debe hacer es causar otro accidente por efectuar una maniobra brusca, cambiar de carril sin avisar a los conductores que puedan venir por detrás o frenar de manera repentina. Hay que actuar con tranquilidad y sin que nuestras acciones puedan perjudicar a terceros.
No enfrentarnos y señalizar
En el caso de que logremos que se detenga, en ningún caso hay que discutir con él ni recriminarle su acción sino que debemos estar vigilantes para que se señalice la posición de los vehículos que se hayan detenido para que no sean arrollados por los que vengan detrás, con más motivo en caso de mala visibilidad o si es de noche.
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