Un alto cargo de Compromís aboga por suprimir las procesiones y las misas

En contra de las procesiones y de las misas y a favor de su prohibición. «Como soy anticlerical no tengo problema en decirlo». Natxo Costa, miembro de Compromís, es subsecretario de la Conselleria de Economía Sostenibles, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, ha sido rotundo al expresar su deseo sobre los actos religiosos.

En el programa Sociedad Valenciana que presenta Juanma Domenech en la emisora 99.9 Plaza Radio, el dirigente de Compromís se ha pronunciado en la mañana de este martes en estos términos en el transcurso del debate que se estaba manteniendo sobre la cuestión de los bous al carrer.

Sobre los eventos taurinos, Costa se ha mostrado partidario de que se revisen los protocolos, se aumente la seguridad y se pregunte a la ciudadanía con la convocatoria de referendums locales "porque es una fiesta que genera muchos problemas".

Al ser cuestionado a continuación por actos como las verbenas o las procesiones, que también pueden causar molestias en forma de cortes de calles, no se ha ocultado: "Yo las procesiones también estoy a favor de prohibirlas", ha apuntado.

Posteriormente, ha insistido en la necesidad de que la ciudadanía se pronuncie sobre si los eventos taurinos les gustan o no pese a que sea un acto con una larga tradición detrás. Ha sido entonces cuando el presentador del espacio le ha preguntado: "¿Nos cargamos la misa también?", a lo que Costa ha replicado de manera inmediata: "También. Yo también estoy en contra. Yo es que como soy anticlerical no tengo problema en decirlo".

Posteriormente, y en declaraciones a LAS PROVINCIAS, se ha reafirmado en sus palabras pese a que ha matizado que las mismas se habían pronunciado en un tono "un poco jocoso".

Costa ha explicado que en su infancia recibió una educación católica pero "de mayor apostaté". Se ha mostrado partidario de que cada persona sea libre para ejercer su libertad religiosa, "pero que ésta se ejerza en espacios cerrados y en las casas y no en los colegios".

Asimismo, ha rechazado la presencia de alcaldes, incluso de formaciones progresistas, en actos religiosos como las procesiones y ha pedido que España imite a Francia o a Italia a la hora de definir mejor la separación entre Iglesia y Estado.

Ha denunciado que la Iglesia "tiene mucha tendencia a inmiscuirse en la vida de los demás" y ha rechazado que intente "imponer al resto su moral".

Ha pedido a quienes se casen por la iglesia "que sean consecuentes y no se divorcien" y se mostrado favorable "a que las mujeres católicas no aborten".

Finalmente, también ha rechazado que algunos curas realicen "determinados actos sexuales que la propia Iglesia rechaza. No estoy diciendo que todos los curas sean pederastas, ni mucho menos", ha matizado para concluir.

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