El robo de mil metros de cable, con el posterior incendio de un edificio técnico en la estación de Massalfassar, que se tradujo en una reducción de la oferta ferroviaria entre Valencia y Castellón desde el martes y el consiguiente caos en el servicio ... simboliza cómo ha sido el año 2021 para el ferrocarril en la Comunitat, especialmente para los trenes de Cercanías, cuya red arrastra años de déficit de inversiones para modernizar tanto la infraestructura como el material rodante, a lo que se añade la falta de personal –sobre todo maquinistas– por el proceso de desvinculaciones.
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Un año marcado, de nuevo, por las protestas de los viajeros ante los retrasos y supresiones de circulaciones o por la baja ejecución del Plan de Cercanías presentado por el Ministerio de Transportes (entonces Fomento) en diciembre de 2017. En el primer caso, el año se cierra que un balance de unas 3.000 supresiones, a un ritmo de unas 240-250 de media al mes, según se puede contabilizar en la cuenta de Renfe en Twitter. Una cifra que ha aumentado en el segundo semestre, especialmente desde octubre, ya que hasta septiembre las supresiones afectaban al 2,7% de las circulaciones programadas (308 en laborable) mientras que, a partir de octubre, el porcentaje ha aumentado al 3-4%.
En el segundo, y según un informe de la Cámara de Contratistas de la Comunitat, Adif ha ejecutado 159 millones en actuaciones de los 1.080 previstos en el Plan de Cercanías, es decir, el 15%. De ellos, 120 corresponden a actuaciones en ejecución.
Pero 2021 también ha estado marcado por el anuncio de la revisión de este plan para afinar las actuaciones pendientes y por –también de nuevo– la propuesta de la Generalitat de solicitar al Gobierno la transferencia de la gestión de Cercanías. Precisamente el jefe del Consell, Ximo Puig, anunciaba este sábado en una entrevista en la 'Cadena Ser' que el próximo martes mantendrá una reunión con la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, para abordar el «hartazgo» ante la situación de Cercanías.
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Hartazgo que trasladaba hace unos días Puig por carta al ministerio remarcando que la situación «no es de hace unos días» e insistiendo en el traspaso pero acompañado de «las condiciones económicas necesarias para una gran reforma». Hacía hincapié, además, en que el problema tiene «raíces históricas». En concreto, estas son las de 2021.
La borrasca Filomena puso de relieve el deterioro de la línea entre Utiel y Cuenca, que tuvo que cerrarse tras detectar Adif 65 puntos con deficiencias para subsanar. Ahora el Gobierno baraja cerrarla y potenciar el transporte por carretera al comprobar que hay mayor demanda.
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Entre las críticas de los pasajeros por aglomeraciones en hora punta llegó la convocatoria de seis jornadas de paros parciales y una de huelga de 24 horas por parte del comité de empresa de Adif para defender el empleo y en defensa de la empresa pública. Finalmente se desconvocó.
La noticia positiva del año ha sido la adjudicación a la planta valenciana de Stadler de parte del 'megacontrato' para los nuevos Cercanías, en concreto, 59 trenes por 998 millones. Alstom fabricará los otros 152 vehículos.
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Continúan las críticas por aglomeraciones debido a las cancelaciones. Renfe afirmaba que sigue el protocolo del Gobierno en los aforos de los trenes.
La renovación de Cercanías aparece incluida en el Plan de Recuperación remitido a Bruselas, ya que el Gobierno prevé sufragar con fondos europeos la mejora de los servicios de ocho autonomías, entre ellas la valenciana.
Las mejoras en la C-3 (Valencia-Utiel) no llegarán hasta 2023, según se desprende de un contrato adjudicado por Adif. Al mismo tiempo, el Gobierno anuncia otro Plan de Cercanías tras cuatro años de parón del anterior. El nuevo documento se dará a conocer en el primer trimestre de 2022.
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Tras un agosto tranquilo, comienzan las obras de renovación del tramo Pobla Llarga-Silla (C-2), que han causado problemas en la línea. La Generalitat, además, reclama de nuevo el traspaso del servicio de Cercanías. Vuelven las supresiones.
Los maquinistas inician una huelga que agrava la situación de caos al incumplirse los servicios mínimos. El ministerio, además, encarga un informe sobre la situación de Cercanías.
Se disparan las supresiones por las bajas imprevistas de los maquinistas mientras los pasajeros activan la campaña 'Mocadors al vent' para reclamar mejoras.
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