Vivencias del 'Harrelson' de Valencia, un exteniente de 99 años

La Policía Nacional ha homenajeado hoy en Valencia a su exagente más veterano, Luis Muñoz Fernández, de 99 años, retirado en 1978 como teniente de la Policía Armada tras 35 años de servicio, y apodado el 'Harrelson' en alusión a la serie de televisión que triunfó en España en los años 70. «Estuve dirigiendo una unidad de hombres que me ayudaban muchísimo. Creo que me lo decían con cariño», afirmó con voz tenue Muñoz, historia viva de las últimas transformaciones y vicisitudes de la policía española.

El acto se celebró en el salón de actos de la Fundación Bancaja con motivo del 196 aniversario de la creación de la Policía Nacional, cuya historia recordó el jefe superior de policía de la Comunitat Valenciana, Jorge Zurita, en su discurso.

Nacido en 1920 en Berrocalejo (Cáceres), Muñoz tiene tres hijas, seis nietos y cuatro biznietos. Estuvo destinado en Vitoria, San Sebastián, Bilbao, Galicia, Madrid, Barcelona, Benidorm y Valencia. «En un motín en la cárcel de Valencia tuvimos que subir al tejado con una escalera de los bomberos. Yo tenía cincuenta años pero fui el primero para dar ejemplo al resto» de agentes, que eran más jóvenes.

A lo largo de su trayectoria profesional, Muñoz vivió varias transformaciones del cuerpo, con cambios de uniformidad incluidos, además de los años complicados del franquismo, la transición y la amenaza terrorista de ETA. Algunos de los familiares que le han acompañado en este homenaje, entre ellos su mujer, de 92 años, y dos de sus hijas, recordaron algunas de las dificultades que afrontó cuando prestó servicio en el País Vasco, concretamente los momentos conflictivos que vivió Muñoz en las calles de Lasarte (Guipúzcoa) en los años duros de la 'kale borroka'. «No podía casi ni lavar el uniforme, porque después no había forma de tenderlo. Era un verdadero problema» , explicó una de sus hijas.

Durante sus años de servicio en la Comunitat Valenciana, estuvo al frente de una unidad de intervención y tuvo que hacer frente a situaciones delicadas, como la expuesta, y otras más surrealistas, como las que protagonizaban los turistas ingleses y las «salvajadas» que cometían en los hoteles de Benidorm, «lanzando todos los muebles por los balcones de sus habitaciones».

Respecto a sus experiencias más complicadas, manifestó que el terrorismo de ETA, sin duda, «fue lo más peligroso, no sabíamos dónde estaba el enemigo, podría estar a tu lado, pero hubo suerte...»

También fue homenajeado Jesús Prol Vázquez, jefe superior de policía en la Comunitat entre 1989 y 1994, y Zurita distinguió la gran labor realizada por la secretaria de alta dirección Marisol Ansola, que se jubila este año después de trabajar con 15 jefes superiores en 44 años.

En el acto se entregaron medio centenar de condecoraciones, la mayoría a policías jubilados, y terminó con la interpretación de 'Caruso' de Lucio Dalla por el tenor y policía Juan Ledesma, que fue aclamado una vez más por sus compañeros. Los inspectores Ramiro Blanco, Rafael Pérez y Juan Ramos recibieron sendas condecoraciones en reconocimiento de sus 30 años de servicio; y el policía Francisco Lomas, como víctima del terrorismo.