Las lluvias que vienen a la Comunitat: más intensas, más cortas y más localizadas

Los fenómenos climatológicos están cambiando en la Comunitat y empiezan a seguir un patrón que se va a repetir en los próximos años, como ha explicato esta martes la Agencia Española de Meteorología en la Comunitat, Aemet. Las lluvias que vienen van a tener una gran intensidad, pero serán de corta duración y en lugares más localizados. Como por ejemplo las que se esperan para la tarde de este martes en el litoral valenciano, en las tres provincias, que se suman a las que ya se vivieron la semana pasada en casi toda la región, con lluvia muy abundante en pocas horas y granizo en el interior.

El delegado de Aemet en la Comunitat, Jorge Tamayo, ha explicado cómo se va a desarrollar el temporal previsto para este martes. «Esta Dana va a afectar hoy a la zona litoral de Valencia, Castellón y Alicante, pero el miércoles a medio día está previsto que cesen las precipitaciones con viento de poniente. Esta medianoche en Valencia se prevé ya que tiendan a cesar», ha explicado. Además, desde Aemet están en contacto con la oficina de emergencias 112 para trasladar información de cara a la seguridad de la ciudadanía.

Tamayo ha destacado que las lluvias «van a ser muy concentradas», y espera que el otoño sea húmedo. «Eso es bueno para el campo, siempre que tampoco hayan episodios de días de inundaciones, pero eso ahora no lo sabemos para todo el otoño. Va a ser proclive a la lluvia, pero si va a ser gota fría o no no lo sabemos aún». Lo que sí esperan es que el otoño registre unas temperaturas que estén por encima de las normales. «Por las precipitaciones que se esperan es probable es que sea un otoño húmedo, pero también cálido».

«Estamos teniendo fenómenos más intensos y más frecuentes, siempre ha costado mucho hacer una predicción con exactitud para concretar dónde va a llover, la técnica no lo permite en ningún punto del mundo. Este tipo de fenómenos son muy difíciles de predecir en un sitio y una hora concretos, y si son más habituales ahora cada vez tendremos más problemas para hacer esta predicción, aunque hay mucha información, pero concretarlo con tiempo suficiente ahora no hay forma de saberlo», admite el responsable de Aemet.

En cuanto la temperatura del mar, que continúa muy alta, el delegado de Aemet ha matizado que la Dana que viene «está en altura, a unos 5.000 ó 7.000 metros, y no porque el mar esté caliente vamos a tener lluvias intensas, sino que es una combinación de factores. El otoño es época más proclive para la gota fría en capas altas», ha apuntado.

El jefe de climatología de Aemet en la Comunitat, José Ángel Núñez, ha señalado que en los episodios lluviosos de la semana pasada ya han caído «el 40% de la lluvia normal en todo el otoño, estas lluvias han causado muchos daños, granizadas, reventones, el otoño ha empezado húmedo», ha indicado. «Los modelos estacionales son una tendencia, no tienen la misma fiabilidad que las predicciones», ha dicho también.

«Septiembre suele tener tormentas violentas en el interior y precipitaciones muy pegadas a la costa, y esta Dana que llega este martes tiene unas características similares, intensas en el litoral, con naranja de aviso hoy. No van a ser lluvias de larga duración, serán en el litoral y de corta duración, ya que mañana el viento gira a poniente y cesarán», según Núñez.

Sin embargo, pese a ser húmedo, los expertos destacan que en los próximos años se prevé que se mantengan los niveles medios de precipitaciones, pero eso sí, concentradas en pocos días, combinados con largos periodos de sequía. Es decir, que estará tres meses sin llover pero luego habrán dos o tres días de precipitaciones muy intensas.

Sobre las zonas con más déficit de lluvia son el norte de Valencia, el sur de Castellón, el interior norte de Valencia y el interior sur de Castellón. «La mayor anomalía está en las en comarcas de interior, con un mayor déficit de lluvia. Los 4 años anteriores han sido húmedos o muy húmedos y el déficit se ha producido este año, en fechas en que las precipitaciones suelen ser más eficientes entre invierno y primavera, no torrenciales, de intensidad débil para rellenar acuíferos, pero ese periodo fue de déficit extraordinario de precipitaciones entre febrero y mayo», dice Núñez. «Ha sido un año con precipitaciones concentradas en pocos episodios y muy tardíos, entre mayo y junio».

Sobre las granizadas que cayeron el domingo en zonas de interior como Requena o Benaguasil, Tamayo apunta que no es que nunca se hayan registrado con este tamaño, «pero ahora pasa con mayor frecuencia. No sabemos hasta qué tamaño puede crecer una bola de granizo, pero en la historia se han dado casos de pelotas de tenis o béisbol, que son los mayores ejemplos».

Núñez también ha recordado que en julio de 1987 el granizo en la Safor llegó a ser del tamaño de naranjas, y que el año pasado en Girona el granizo mató a una niña. «Las granizadas son recurrentes, la temperatura está ascendiendo por las actividades humanas pero no sabemos cómo evoluciona en la precipitación, llueve lo mismo pero más concentrado. Son modelos extremos, se dan con poca frecuencia, no sabemos si están aumentando las granizadas extensas. Si estamos subiendo la temperatura los patrones de precipitación se van a alterar, serán más intensas, más focalizadas en la costa, de breve duración, con meses que apenas caerá una gota. Serán fenómenos más energéticos, violentos, pero tenemos la incertidumbre sobre si eso será así, se están haciendo estudios», añade Núñez.

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