El negocio de las ecografías 4D

Este tipo de ecografía permite observar al futuro bebé en tres dimensiones, en movimiento, con sus rasgos bien definidos y con un tono de piel prácticamente idéntico al que tendrá al nacer.

Por una parte, y como explica Vicente José Diago Almela, presidente de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de la Comunidad Valenciana, este tipo de ecografías se realizan en los hospitales públicos «en casos seleccionados, cuando ves una malformación y quieres documentarla mejor con una 4D». Diago señala que «hacerlas a todas es inviable por la gran presión asistencial que tenemos en los hospitales públicos, las consultas están muy saturadas». «Se hace en casos seleccionados con pacientes de alto con riesgo en los que haya malformación. Por capricho no se hace ninguna, no va a demanda, sólo se hace si el profesional considera necesario hacerla», recalca. Por ejemplo, malformaciones como el labio leporino o problemas en algún dedo o alguna falange suelen ser los motivos más habituales por los que los especialistas optan por realizar una ecografía 4D y poder, de esta forma, documentar mejor el caso, detalla.

Aún así, reconoce que esta tecnología se utiliza prácticamente a diario, aunque las clásicas ecografías en 2D siguen copando, con diferencia, el seguimiento de las mujeres embarazadas, pacientes que suelen recibir dos book con imágenes, uno a las 12 semanas y otro a las 20. Pese a ello, señala también que en casos puntuales «y si la carga de faena es poca», puede realizarse también alguna 4D, aunque no suele ser habitual.

También existen centros que, gracias a estas técnicas, convierten en toda una experiencia festiva y familiar el proceso de conocer el aspecto que tendrá el bebé al nacer. En la Comunitat, según fuentes del sector, hay más de una decena de estos centros, realizan de media entre 60 y 70 ecografías al mes y facturan entre 48.000 y 72.000 euros anuales (aunque precisan que estas cifras varían de forma ostensible de unas empresas a otras).

En este escalón, por ejemplo, se incluiría la compañía Ecox, que cuenta con 50 centros en España, Portugal y Brasil (tres de ellos en Torrent, Alicante y Orihuela). Marta Benito, responsable del departamento de formación de la empresa, describe que realizan ecografías con carácter «lúdico y emocional» (con tecnología 5D). Esta compañía nació, precisamente, en Alicante en 2007 y Benito recuerda que el boom de la demanda se registró entre 2010 y 2011. En la actualidad, la crisis económica y la bajada de la natalidad ha afectado a la actividad de unos centros que, sin embargo, durante la pandemia, pudieron beneficiarse de las restricciones sanitarias impuestas en la red pública con la limitación de acompañantes.

Este tipo de ecografías también se realizan en clínicas y hospitales privados, donde compaginan la parte lúdica con la diagnóstica. Es el caso, por ejemplo, de la Clínica Parc Central de Torrent. Gloria Andrea Soto, técnico de imagen para diagnóstico de la ecografía de la citada clínica, señala que la mayor parte de las usuarias contrata este servicio 5D conjuntamente con el control del ginecólogo, que es el encargado de realizar el seguimiento (esta clínica puede hacer, de media, unas 150 ecografías de este tipo al mes); aunque también puede contratarse únicamente la ecografía.

En ambos planteamientos, los interesados reciben un pendrive con el vídeo, fotografías impresas y el audio con el latido del corazón del bebé.