Berlanga y las Fallas

Con motivo de la conmemoración del centenario del cineasta valenciano Luís García Berlanga se ha puesto en marcha el denominado «Año Berlanga», durante el cual se programarán numerosas actividades, entre ellas exposiciones, como la actualmente inaugurada en el MuVIM, conferencias, edición de libros y un largo etcétera de proyectos con los que tener la oportunidad de que todos conozcamos la importante proyección de García Berlanga en la historia del cine y, sobre todo, su vertiente humana, aspecto éste menos conocido.

Si comparamos algunas de sus conocidas películas, como por ejemplo 'La escopeta nacional', 'Todos a la cárcel' o 'La vaquilla', con el ambiente que rodea al mundo fallero, sobre todo con la falla, observaremos que tienen un regusto especial con una carga burlesca de sus personajes relacionados con los ninots.

La fiesta ha estado siempre en su espíritu y pensamiento, de ahí que la edición de la XXX Mostra de Valencia - Cinema del Mediterrani le rindiera homenaje plantando una falla diseñada por Guillermina Royo-Villanova y realizada por los artistas falleros Latorre&Sanz consistente en un gigantesco zapato de color rojo de aguja alta en cuyo interior aparecía el busto de García Berlanga, con lo que se escenificaba el fetichismo del realizador, reconocido por él mismo en varias entrevistas.

La segunda falla de la que se tiene noticia es la que plantó en 2007 la comisión de Mossén Sorell-Corona titulada 'Historia d'una mamella'; proyecto que recogía la frustrada idea para la plaza del Ayuntamiento que se fraguó en 1987 después de contemplar la cremà de la falla de la plaza del Ayuntamiento junto a su amigo y escritor valenciano Manuel Vicent. La idea se trasladó al entonces alcalde de la ciudad y quedó en agua de borrajas. El proyecto lo recogió la comisión de la Falla Corona y lo plasmó en la calle el maestro carpintero Manolo García.