Secciones
Servicios
Destacamos
Cuando se retiró del campo el pasado sábado un murmullo envolvió Mestalla y es que en el ambiente se palpaba que era una lesión importante. Y la noticia se ha confirmado. Garay se pierde lo que queda de temporada en su mejor momento y cuando, con Paulista, forma una de las mejores parejas de centrales de la liga. Cuando parecía que las lesiones, que tanto hemos sufrido, desaparecían por un tiempo ha llegado una nueva y, lo que es peor, la más grave que puede tener un futbolista. Pero situaciones como estas ocurren en el fútbol y hay que seguir. La lesión llega en el peor momento, con el equipo inmerso en las tres competiciones y con una plantilla limitada en esa posición.
Es el turno de César, el nuevo director deportivo. Es ahora cuando tiene que demostrar su valía y su capacidad para encontrar el recambio necesario para que la ausencia del argentino se note lo menos posible. También es la hora de que que nuestro entrenador sepa gestionar la situación pero, sobre todo, es la hora de Mangala y Diakhaby, dos jugadores que, de momento, van a tener la responsabilidad de demostrar que están capacitados para jugar en este equipo. Porque sin Garay y, sin Paulista para la eliminatoria frente al Atalanta en Champions, serán casi con toda seguridad nuestra pareja de centrales. Es lo que hay, como dirían en el club.
Así, a bote pronto, me vienen a la memoria algunas lesiones de este tipo que han afectado a jugadores del Valencia y, curiosamente, dos se produjeron en partidos contra el Atlético de Madrid, nuestro próximo rival en casa, Rodrigo y Canales. En 2015 Rodrigo sufrió una rotura parcial del ligamento cruzado que le mantuvo alejado de los terrenos de juego cerca de tres meses. Pero es la lesión de Canales en 2012 la que más se asemeja a la de Garay. Y más recientes son las de Piccini o Coquelin. Pero no es momento de lamentaciones, es tiempo de remar juntos y de creer en nuestros jugadores, en los que están. Ahora es cuando este equipo tiene que ser más equipo que nunca.
Y una vez más Celades se ha ganado mi respeto y confianza. El técnico ha dejado clara su postura sobre Garay y ha declarado que ojalá el club mantenga su propuesta y renueve al jugador. Con estas palabras demuestra que dice lo que piensa sin importarle posibles represalias de los actuales dirigentes. Y lo más importante, hace piña con los jugadores y demuestra su complicidad con ellos y su sensibilidad. El club también tiene ahora la posibilidad de demostrar su grandeza con algún gesto hacia un jugador que ha demostrado su implicación y valía y que seguro lo seguirá haciendo como hasta ahora.
Vaya desde aquí el apoyo de todo el valencianismo al futbolista en estos duros momentos, deseándole una pronta recuperación y esperando volver a verle muy pronto en el campo. ¡Amunt G24!
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.