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Urgente La juez de la dana imputa a la exconsellera Pradas y al exsecretario autonómico Argüeso

Siguen detrás de la pancarta

BELVEDERE ·

Pablo Salazar

Valencia

Martes, 18 de febrero 2020, 07:55

España tiene un Gobierno de coalición entre socialistas y comunistas/populistas. En la autonomía valenciana también manda el PSOE aunque en este caso la alianza es con los nacionalistas de Compromís y nuevamente con Unidas Podemos. Y en la ciudad de Valencia, alcalde nacionalista con respaldo socialista. Empiezo aclarando lo que seguramente todo el mundo conoce porque a veces da la impresión de que algunos dirigentes con mando en plaza siguen ocupando los bancos de la oposición y no se han dado cuenta (o prefieren no darse cuenta) de que son ellos quienes ahora están al mando de la nave. El comodín de echarle la culpa de todo a Madrid es muy socorrido, aunque el PSPV ya no puede hacer uso por razones obvias. Pero lo realmente patético es contemplar la reacción demagógica de algunos políticos que ante una reivindicación sectorial se limitan a indicar que los que protestan tienen razón y poco menos que a salir a su lado en manifestación, como si la protesta no fuera con ellos, como si no pudieran hacer nada, como si el responsable siguiera siendo el PP, o el capitalismo salvaje, las cadenas de distribución, Trump y su política de aranceles, la restricción de las ayudas de la UE... A la consellera de Agricultura y de un montón de cosas más relacionadas con el medio ambiente, la nacionalista Mireia Mollà, se le escapaban las piernas el pasado viernes para enfundarse una camiseta y ponerse detrás de una pancarta hombro con hombro con los agricultores. Y si bien es cierto que algunos de los factores antes mencionados inciden de forma tan directa como negativa en la rentabilidad que pueden obtener los agricultores, lo que cabe preguntarse es qué ha cambiado el Consell del Botánico (primero el I y luego el II) en la política agraria, cómo ha influido en el campo valenciano, en qué ha ayudado a los agricultores. Porque no basta con decir que el sector primario es muy importante ni con asegurar una y otra vez que este Gobierno sí que está por la defensa de la huerta valenciana sino que es necesario implantar medidas que de verdad hagan notar un cambio, que introduzcan nuevas variables, que traten de propiciar una reacción. Como no es suficiente con proclamar que el Consell aboga por un nuevo modelo productivo para la economía valenciana que supere el esquema tradicional de turismo de sol y playa y de construcción indiscriminada si de verdad no hay un acompañamiento de medidas, subvenciones públicas y fomento de actividades alternativas que hagan ver de una forma evidente cuál es ese otro modelo menos dependiente de la llegada de visitantes extranjeros y del ladrillo.

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