El Valencia es de su afición

Desde que se anunció que el sábado día 8 se iba a celebrar la manifestación contra Meriton marqué esa fecha en mi agenda con mayúsculas. Y desde entonces he esperado ese momento con impaciencia y mucha ilusión, esa ilusión que hacía tiempo no tenía y ... que había perdido todo su sentido para el valencianismo. Por motivos personales, imprevistos, no pude asistir a la manifestación con todo el dolor de mi alma. Quería estar y debía estar, me lo pedía el corazón y era un ejercicio obligatorio de responsabilidad y compromiso para todo valencianista. Ojalá poder volver salir a la calle para celebrar la victoria del valencianismo y la derrota de Meriton. Esa no me la perdería por nada. A lo largo del día mi familia y amigos, que allí estaban todos, me fueron enviando fotos y vídeos de la marcha poniéndome los pelos de punta y haciendo que derramase alguna que otra lagrimita. Es emocionante sentir como nuestro club es capaz de despertar tantos sentimientos incluso desde la distancia. Todos ataviados con sus camisetas, bufandas, gorras y banderas guardadas desde hace ya demasiado tiempo. Qué ganas teníamos ya de sacarlas a la calle de camino a Mestalla. Desde todos los rincones del mundo llegaban mensajes de apoyo y es que aunque algunos intenten callarnos haremos que se nos escuche en todas partes. Estuve durante toda la tarde pendiente de las redes sociales y desde el principio supe que lo que se iba a vivir marcaría un antes y un después en la etapa de Meriton en el Valencia. Familias enteras, padres con hijos, grupos de amigos, peñas de toda la Comunidad, todos los que aman al Valencia Club de Fútbol allí estaban. Es difícil quedarse con una imagen porque hubo muchas que derrochaban sentimiento y pasión. Ese hombre mayor con su bufanda en el cuello, brazos en alto y con una sonrisa de lado a lado orgulloso de ser del Valencia, rodeado de jóvenes jaleándole y admirándole. Ese chaval ondeando al viento entre la multitud esa bandera que es la de todos y mirándola con orgullo. Esos niños y niñas a hombros de sus padres, con sus camisetas y sus cartulinas hechas en casa en las que reivindican que el futuro es de ellos. No podría elegir porque cada imagen respiraba el mismo sentimiento. Pero quizás, por lo que representa, por su figura y porque refleja el objetivo que perseguimos, destacaría esa pancarta con la imagen de Don Arturo Tuzón y la leyenda 'El Valencia Club de Fútbol será lo que los valencianos quieran'. Y estamos más cerca de conseguirlo. Hemos recuperado la ilusión y la esperanza y los días para Meriton en el Valencia están contados, ya no hay marcha atrás. Nuestra presión, social y judicial, valdrá la pena y lo conseguiremos entre todos, unidos, como hasta ahora.