

Secciones
Servicios
Destacamos
El dilema era el que sigue: ¿esperaban la llegada de la ambulancia del SAMU o trasladaban a la víctima en el coche patrulla al centro médico más cercano? La decisión que tomaron el cabo primero José Damián Martínez y el guardia civil Francisco Rodríguez salvó la vida de la mujer acuchillada por su expareja el 8 de marzo de 2021 en Massamagrell.
La propia víctima valora y agradece la actuación de los dos agentes de la Agrupación de Reserva y Seguridad de la Guardia Civil de Valencia. «Arriesgaron con su decisión su carrera. Ellos sabían que la ambulancia iba a tardar 20 minutos desde Sagunto, y decidieron jugársela para salvarme porque yo me desangraba. El charco de sangre era enorme. Tenía posibilidades de morir por el camino», recuerda en una carta de agradecimiento.
Tras las 11 cuchilladas que sufrió, la mujer llegó consciente al Hospital Clínico. Los guardias civiles taponaron con un trapo las heridas de la víctima y la trasladaron al centro de salud, donde un médico la estabilizó, y después abrieron camino a la ambulancia hasta el hospital. «Esta decisión salvó mi vida. Soy una víctima afortunada porque sigo viva. Tengo secuelas psicológicas y físicas, pero puedo ver a mis hijos cada mañana», afirma en su escrito.
Noticia Relacionada
Agradecida por la actuación de los agentes, la víctima los recibió en su domicilio en Massamagrell y se fundió en un emotivo abrazo con ellos. «Recuerdo que el cabo me dio la mano porque yo decía que me iba a morir, y él dijo que eso no iba a ocurrir mientras ellos estuvieran allí, y aquí estoy», relata la mujer con emoción.
«Hubieron ese día otros dos ángeles (no puedo llamarlos de otro forma), por una parte mi compañero de trabajo que venía a recogerme y un vecino, al que no conocía, pero ambos se jugaron la vida golpeándolo (al agresor) hasta que pudieron apartarlo», añade la carta enviada por la víctima a la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia.
La mujer recuerda el día de la brutal agresión como una pesadilla: «Salía a las 8 de la mañana para ir a trabajar y ahí estaba él, esperando en la esquina de mi casa. Me asestó 11 puñaladas que me atravesaron todo el cuerpo. Yo solo podía gritar, y cuando lograron apartarlo de mí, creía que iba a morir y solo pedía un teléfono para despedirme de mis hijos». Un compañero de trabajo de la víctima logró detener el acuchillamiento al golpear al agresor con una llave cruzada que llevaba en el maletero de su coche.
Respecto a los crímenes machistas, la mujer apuñalada asegura que la sociedad «tiene que concienciarse de que esto no puede pasar, porque no podemos normalizar los asesinatos de mujeres por el hecho de decir basta, de decir quiero separarme, de decir hasta aquí».
Aunque reconoce que se dieron «un conjunto de circunstancias que favorecieron que todo saliera bien» en su caso, considera que debemos luchar «para que ninguna otra mujer se vea entre la vida y la muerte o quizá ya no se vea más».
La misiva termina con el deseo de que el 25 de noviembre, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, «se recuerde como un día más en el calendario» porque no hubiera más víctimas.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Almudena Santos y Lidia Carvajal
Rocío Mendoza | Madrid, Álex Sánchez y Sara I. Belled
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.