Imagen del embalse de junio de este año. Irene Marsilla
Historia visual: El día que tembló Forata

La presa de Forata no aguantaría otra gran dana sin obras de emergencia

Como cuatro Ebros. Así fue la riada de más de 2.000 metros cúbicos por segundo única en 10.000 años y que embistió el embalse dejándolo con daños severos y «riesgo de vertido incontrolado». La CHJ reconoce que se precisan obras urgentes «para operar en condiciones ordinarias»

Domingo, 15 de diciembre 2024, 00:32

Del desarrollo del episodio y ante la incerteza de ocurrencia de otro similar, se manifiesta la necesidad de tener todos los elementos que componen la presa operativos en condiciones de explotación ordinaria para asegurarnos una correcta respuesta en situaciones sobrevenidas o extremas» (...) «El riesgo de ... vertido incontrolado obliga a realizar obras para evitar esa posibilidad». La propia Confederación Hidrográfica del Júcar lo reconoce en el documento interno llamado 'Resolución de declaración de emergencia y adjudicación de obra' emitido tras la histórica riada que golpeó la presa de Forata, puso en jaque a la Comunitat y llevó las alertas por toda España: el embalse necesita de obras de emergencia por los daños sufridos por los envites del agua y para afrontar en condiciones de seguridad la posible llegada de otra dana tan destructiva como la del pasado 29 de octubre. Los trabajos para reparar los daños sufridos ya están adjudicados pero aún pendientes.

Publicidad

Desgranemos el día del gran diluvio. En la fecha de la mortífera riada, los tres trabajadores que se encargan del mantenimiento de la infraestructura situada a unos 60 kilómetros de Valencia, y con Yátova o Macastre como municipios más cercanos, estaban en la llamada 'casa de la administración' de Forata. La situación de alerta meteorológica los tenía en guardia. A pie de presa. El cielo se abrió por la mañana sobre Utiel y Requena. Las inundaciones ya arreciaban allá en el norte. Pero los técnicos de la CHJ miraban otra ruta en sus mapas. La crecida del río Magro llevaba inevitablemente un camino:sus aguas confluyen en el mastodóntico dique de Forata, la única vía posible de salida para la crecida.

Es a partir de las dos de la tarde cuando el caudal del embalse empieza a crecer. Quedaban aún más de tres horas para que se constituyera el CECOPI y se viviera lo más álgido de la emergencia. Pero en Forata ya se fraguaba el desastre. A las 7 de la mañana entraban apenas 5 metros cúbicos por segundo. A las 12 subieron a 21. A las 14 horas se dispararon a 106. A las tres de la tarde, el incontrolable torrente llegaba ya a 510 metros por segundo de agua entrando en el embalse. Yentre las cuatro y las cinco de la tarde se acerco a los 2.000 metros cúbicos por segundo. Y más aún a las seis de la tarde.

.

Este contenido no puede visualizarse correctamente en este formato. Ver experiencia completa

Basta una comparación para entender la monstruosa cantidad de agua que asumió la presa de Forata. Por el río Ebro fluyen alrededor de unos 500 o 600 metros cúbicos por segundo. El titán hídrico que azotó el embalse valenciano fue como cuatro veces el río más caudaloso de España. Forata empezó a liberar agua a las 17.34 horas. «De acuerdo con las normas de explotación del embalse, las compuertas de la presa estaban abiertas con objeto de que, ante una situación de avenida, la presa pudiera verter de forma automática cuando se llega al umbral del aliviadero», como señalan desde la CHJ.

Publicidad

Hasta 1.111 metros cúbicos por segundo salieron en los momentos de más flujo de agua, entre las ocho y las nueve de la noche. Justo en la misma franja horaria en que se emitió desde el CECOPI la tardía y confusa notificación de Es-Alert que resonó en los móviles de todos los valencianos. Y hasta las 9 de la mañana del día siguiente no empezó a disminuir la cantidad de agua vertida por el embalse.

Fue a las 16.55 horas cuando desde la Confederación se lanzó la primera señal de alerta a Emergencias. A esa hora se supo ya que el agua iba a empezar a salir de Forata. «Se comunica que en la próxima hora se prevén caudales superiores a 1.000 metros cúbicos por segundo en el río Magro por el alivio de la presa. Las siguientes poblaciones se pueden ver significativamente afectadas por el río: Montroi, Real, Alfarp, L'Alcudia y Algemesí».

Publicidad

Inicialmente no fueron alertadas todas las poblaciones. Algunos alcaldes, como el del Algemesí, han lamentado que no recibieron el aviso o que no les llegó por el conducto más oportuno. De hecho, la alerta que emitió Emergencias y que hizo llegar a los municipios no concretaba las poblaciones ni hablaba de la salida de agua en Forata: «La CHJ informa que podrá alcanzar los 1.000 metros cúbicos por segundo abajo del embalse de Forata como consecuencia de la precipitación acumulada. Se notifica a todos los municipios ribereños del río Magro y del río Júcar, desde Algemesí hasta la desembocadura en Cullera.

Este contenido no puede visualizarse correctamente en este formato. Ver experiencia completa

¿Hubo afección en los municipios como consecuencia del aliviado en Forata?Parece obvio, y la Confederación Hidrográfica del Júcar no lo oculta. «Las salidas del embalse incrementaron de forma importante los caudales del río Magro. Estos caudales causaron importantes daños en la población de Algemesí y alcanzaron el río Júcar, que a su vez ya tenía importantes caudales antes de la confluencia». En la comarca de la Ribera perdieron la vida nueve personas el funesto 29 de octubre. Tres de ellas, en Algemesí.

Publicidad

18.05: «Peligro de rotura»

¿Se barajó el riesgo de rotura de la presa en algún momento? Lo cierto es que sí. El embalse pasó por los diferentes escenarios de emergencia que se contemplan en la normativa de estas instalaciones, aunque sin llegar al 3, el más severo: «Probabilidad de rotura elevada».

Desde la CHJ señalan que todos ellos se fueron notificando al CECOPI. A las 17.26, el escenario 0, «en el que se aconseja la intensificación de la vigilancia y el control de la presa, no requiriéndose la puesta en práctica de medidas de intervención para la reducción del riesgo», según los escenarios de emergencia que recoge el Ministerio de TransiciónEcológica. A las 17.52 se pasó al escenario 1: «De no aplicarse medidas de corrección (técnicas, de explotación, desembalse...), podría ocasionarse una avería grave de la presa». Y finalmente el escenario 2 a las 18.05: «Existe peligro de rotura o avería grave de la presa y no puede asegurarse con certeza que pueda ser controlado mediante la aplicación de las medidas y medios disponibles». Pero según la Confederación, «en ningún momento se llegó a declarar el escenario 3 de la presa».

Publicidad

Este contenido no puede visualizarse correctamente en este formato. Ver experiencia completa

¿Cuál es el panorama hoy en Forata tras los daños sufridos después de la avenida de agua? Ahora mismo no es una infraestructura preparada para soportar una dana de las características de la padecida por Valencia. Aunque la estadística dice que esta tardará una eternidad en volver a suceder. «La avenida de algo más de 2.000 metros cúbicos por segundo es el asociado a un periodo de retorno de 10.000 años». Ese es el tiempo estimado por la probabilística y los informes hídricos para que pueda darse una situación similar. Pero el 29-O ocurrió, y si hoy pasara, la presa no está preparada para ello. Aunque las obras para remediarlo «se espera que comiencen en las próximas semanas», como señalan desde la CHJ.

Los desperfectos causados por el agua son numerosos. El más preocupante, el «aterramiento de la toma de agua», el único desagüe profundo operativo. Con dos problemas. Es el único punto en la actualidad por el que se puede desaguar la presa. Además, ese es el canal usado para proporcionar caudal a los regantes de la zona. «Se debe actuar de manera inmediata por la proximidad de la campaña de riego», señala el documento de la CHJ. Aquí ya se han llevado a cabo algunas «tareas de retirada de sedimentos que taponan la toma de riego», con la ayuda de la Unidad Militar de Emergencias. La CHJ lleva a cabo ahora «tareas de planificación para comenzar con las actuaciones de urgencia» necesarias para lograr la plena operatividad y seguridad de Forata.

Noticia Patrocinada

Otro daño preocupante es el sufrido por los caminos perimetrales del embalse. Empleados no sólo para inspeccionar la estanqueidad de la infraestructura. También son al fin y al cabo muros naturales para el agua. «El riesgo de vertido descontrolado por la margen derecha de la presa, al encontrarse el camino de servicio a una cota inferior a la de coronación, obliga a realizar obras de recrecido para evitar esa posibilidad».

Y otro punto de preocupación. Las galerías inferiores del embalse quedaron inundadas durante «la laminación de la avenida», la misión salvadora de Forata que impidió que el daño fuera aún mayor en las poblaciones situadas en el curso posterior del río Magro. Allí abajo, en las profundidades de la mole de cemento, están los sistemas de seguridad necesarios para las comunicaciones del embalse, y sobre todo los mecanismos de auscultación. Son los aparatos necesarios para comprobar la firmeza de la presa y descartar la aparición de fisuras o grietas.

Publicidad

Este contenido no puede visualizarse correctamente en este formato. Ver experiencia completa

Estas son precisamente algunas de las inspecciones de seguridad que tienen que pasar todos los embalses de España. «Se revisan de forma permanente», explica la Confederación Hidrográfica del Júcar. Y la auscultación es el proceso principal para determinar el buen funcionamiento de estas infraestructuras hídricas. «Se comprueba la estabilidad de la presa y si hay filtraciones en el cuerpo del embalse», detallan en la CHJ. Otra operación que se realiza con cierta periodicidad es realizar movimientos de las compuertas de salida de agua «para garantizar su operatividad».

Las obras de emergencia necesarias para reparar Forata iniciaron su camino el pasado 28 de noviembre. Esa fue la fecha en que por parte del presidente de la CHJ, Miguel Polo, se firmó la autorización de los trabajos por la vía de urgencia. Es decir, «sin obligación de tramitar expediente de contratación». La legislación da esta potestad a la administración «cuando tenga que actuar de manera inmediata a causa de acontecimientos catástroficos o de situaciones que supongan grave peligro». Dos son ya las empresas adjudicatarias de estos trabajos: Vielca Ingenieros y CHM Obras e Infraestructuras. Las labores tienen un presupuesto de 6,5 millones.

Publicidad

En las respuestas remitidas a LAS PROVINCIAS, la Confederación Hidrográfica señala que a la espera de esas tareas, que servirán para «recuperar el normal funcionamiento del embalse», la infraestructura se encuentra hoy «estable y con plenas garantías de seguridad», aunque en los documentos en los que se adjudican las tareas se especifica cómo de arriesgada sería actualmente la llegada de una dana tan terrible como la del 29 de octubre.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad