Una profesora, en paro tras 35 años al no tener el valenciano

«Quería ser un ejemplo para las nuevas generaciones. Que vieran que si se esforzaban podrían llegar a algo como lo hice yo. Pero ahora, ¿Qué ejemplo damos?», se lamenta Encarna. No le faltaba mucho tiempo para jubilarse pero, como es común, quería retirarse por la puerta grande. No le han dado una justificación clara, pero la docente lo tiene claro: la han echado por no tener la titulación de valenciano. «Mi abogado ya me ha dicho que no me van a contestar. En la asociación 'Hablamos Español' me han informado de que en estos casos se dedican a hacer el silencio administrativo», lamenta Encarna.

Atribuye su pérdida de empleo a no tener un certificado que acredite que habla valenciano. «Lo hablo mejor que ellos. Siempre he combinado las dos lenguas en mis clases». Le han dado la solución de irse a trabajar a una zona castellanohablante. Utiel para se exactos. Pero tampoco le convence el cambio: «Me ofrecen un contrato de seis horas y yo quiero estar en las mismas condiciones en las que he estado hasta ahora».

Por el momento, no ha encontrado una solución más allá que pedir que se reconozca su caso y alzar la voz para tratar de impedir que otras personas se encuentren en la misma situación. «Me han abandonado como a un perro», dice con rotundidad.