Puig trata de tranquilizar a los regantes tras no reunirse con Murcia y Andalucía en defensa del trasvase

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, recorrió ayer varias comunidades de regantes del sur de la provincia de Alicante. En una casi maratoniana jornada visitó la balsa de la Comunidad de Regantes del Cuarto Canal de Poniente en Benferri y el pantano de Crevillent y se reunió en Elche con la Comunidad de Regantes Riegos de Levante.

El propósito no fue otro que el de explicitar un respaldo sin fisuras a los regantes en la defensa del trasvase Tajo-Segura. La visita de Puig se produjo una semana después de que el jefe del Consell rehusara firmar junto a sus homólogos andaluz y murciano una resolución en defensa de la infraestructura hídrica.

El Ministerio de Transición Ecológica ha puesto en marcha una modificación de las normas de explotación del trasvase al Segura que conllevan la reducción de los caudales de 38 a 37 hectómetros cúbicos mensuales. También planea aumentar el caudal ecológico de la cabecera con la consiguiente disminución de los caudales trasvasables.

Ante esta situación el presidente de la Generalitat reiteró a los regantes que el trasvase es "absolutamente irrenunciable" y afirmó que la Generalitat trabajará "en todos los ámbitos" para garantizar "agua para siempre" para la agricultura de las comarcas alicantina. Es más, Puig subrayó que "está en juego la pervivencia de un sector fundamental para la economía".

Puig apuntó que trabajará para lograr un acuerdo en torno al trasvase Tajo-Segura, pero advirtió de que, "si no se cumple con este espacio de diálogo", el Consell adoptará "soluciones de carácter jurídico tal y como el lunes sostuvo la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, tras reunirse con su homólogo murciano.

El jefe del Ejecutivo valenciano dijo que "cualquier cambio de reglas tiene que estar acordado", y argumentó que resulta necesario consolidar el trasvase Tajo-Segura como garantía del mantenimiento del sector agroalimentario. Insistió también en que el camino tiene que ser "dialogar, hablar y acordar, teniendo en cuenta el interés general", lo que implica que haya "agua para siempre" para comarcas tan necesitadas como la Vega Baja y el Vinalopó.

También añadió que el sector agroalimentario es un "instrumento fundamental para el progreso" que permite tener "un pilar permanente en Europa", por lo que remarcó que el debate sobre el trasvase Tajo-Segura no se debe llevar "a las vísceras" ni considerar una "cuestión identitaria", porque lo que hace es garantizar la supervivencia de la agricultura, una pieza clave para la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible

Los regantes, por su lado, continúan con las medidas de presión. El Círculo por el Agua convocó ayer una manifestación en Madrid para el próximo 24 de mayo con el fin de mostrar su rechazo a las medidas "limitativas" del Gobierno central en relación al trasvase Tajo-Segura.

La manifestación comenzará en Ifema y culminará frente a la sede del Ministerio para la Transición Ecológica, según informaron fuentes del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS).

La concentración irá precedida de una serie de movilizaciones contra el recorte de los volúmenes del trasvase para regadíos que comenzarán el 6 de mayo con una concentración frente a la Delegación del Gobierno de la Región de Murcia, entre las 10.00 y las 12.00 horas.

Además, el 15 de mayo, de 11.00 a 13.00 horas, está prevista la realización de manifestaciones en municipios de las provincias de Alicante, Almería y Murcia en defensa del Tajo-Segura.

El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, por su parte, instó ayer a Puig, a "centrarse en las verdaderas prioridades de los valencianos" y en defender el trasvase.

"Ahora lo que hace falta es que el presidente de todos los valencianos vaya a la capital de España a exigir hasta la última gota del trasvase, las ayudas a nuestros sectores más punteros y que tan agraviados se han visto con la crisis de la Covid", explicó Mazón que criticó la reunión que mantuvo ayer el jefe del Consell con el ministro de Administración Territorial, Miguel Iceta.

Por su parte, la diputada de Ciclo Hídrico, Ana Serna, agradeció a Puig que finalmente "se haya unido al aquelarre del agua, utilizando sus propios términos" y se haya "dado cuenta de que es mejor ir a una todos juntos para reclamar cada gota del trasvase Tajo-Segura para Alicante".

"La presión social ha hecho efecto y Puig ha entendido que la única forma y la mejor de defender los intereses de esta provincia por el agua es ir todos a una", añadió.