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El incremento de funciones que tienen que asumir ahora los celadores del hospital La Fe de Valencia ha llevado a que pidan a Sanidad ... un refuerzo de seis profesionales, con los que consideran que serían suficientes para poder hacerse cargo del traslado de los fallecidos al mortuorio en horarios de guardias, es decir, por las tardes y noches y los fines de semana y festivos, cuando hay menos personal trabajando.
Este pasado viernes el hospital, a través del sindicato UGT, envió una notificación a la directora general de personal de la Conselleria de Sanidad en la que exponía esta circunstancia y la necesidad de este aumento de plantilla con esos seis celadores para La Fe. Se trata de la tercera vez que el departamento pide un refuerzo por este motivo, pero en las dos anteriores ocasiones el gobierno del Botánico desestimó la solicitud y la guardó en un cajón. Ahora se vuelve a reclamar para poner una solución que está mermando la atención al resto de pacientes debido a la sobrecarga de trabajo.
Durante 30 años algunos hospitales de Valencia, como son los casos de La Fe, el Clínico y el Doctor Peset, esta función de trasladar a los fallecidos al mortuorio la asumían las funerarias privadas, que estaban en los hospitales de guardia, por un acuerdo con la Asociación de Empresas de Pompas Fúnebres de Valencia (Aseva). El pasado mes abril, tras varias críticas de empresas que no formaban parte de esta asociación y que consideraban que había desigualdad de oportunidades en la competencia, Sanidad (gobernada por el Botánico) decidió dejar sin efecto este acuerdo. Desde entonces, pasaban a ser los celadores de cada hospital los que se tendrían que hacer cargo de los traslados, como ocurre en prácticamente todos los centros de la Comunitat.
Desde la Fe, a través de esta reclamación de UGT, se pone de manifiesto que ahora tanto celadores como enfermeras y médicos deben dedicar mucho tiempo a estas funciones, como rellenar certificados de defunción, revisar la documentación, cumplimentar el libro de registro del mortuorio, hacer un registro de cada cadáver, lo que conlleva más responsabilidades, especialmente para los celadores. Ya en mayo solicitaron a la gerencia de La Fe un aumento de 10 celadores para reforzar la plantilla en todos los turnos. La dirección aceptó en parte la petición y abrió un expediente de modificación de plantilla para la contratación de 6 vacantes de celador. Pero Sanidad lo desestimó.
En junio volvieron a solicitar 6 celadores, pero de nuevo la petición quedó archivada en un cajón y la conselleria no hizo caso. En julio la subdirección de personal del hospital insistió en la creación, aunque rebajando el número a 3 vacantes que siguen sin llegar. Y este pasado viernes vuelven a reclamar, pero en este caso por primera vez al actual gobierno PP-Vox, ese refuerzo de 6 celadores. Desde UGT consideran que la plantilla de celadores se configuró sobre unas necesidades que ahora se han ampliado sin haber existido un aumento proporcional en el número de efectivos del hospital y que ese refuerzo «es irrenunciable», según manifiestan los representantes de los trabajadores.
Por el momento los otros dos hospitales afectados por la orden del Botánico, como son el Clínico y el Peset, no han solicitado refuerzos de personal para asumir estas nuevas funciones y consideran que disponen de suficientes celadores para realizarlas. Estos dos hospitales reforzaron su plantilla de celadores con la consolidación de vacantes estructurales post Covid en 2021 (el Clínico incorporó 28 efectivos), pero La Fe decidió incrementar otras especialidades de personal, no celadores.
Al absorber estos servicios que antes hacían las funerarias, desde La Fe explican que, dado el tamaño del hospital, las distancias son mayores, y que los celadores tardan unos 45 minutos en realizar cada traslado al mortuorio. Suelen hacer unos seis servicios de media durante cada guardia (desde las 15 horas hasta las 8 horas del día siguiente) y se necesitan dos personas para llevar a cada fallecido, por lo que se trata de un trabajo que deja con menos efectivos para atender al resto de pacientes que necesiten algo.
En cada intervención hay unos trámites que cumplimentar, ya que el celador tiene que trasladar el cadáver, se tiene que comprobar que todo está correctamente rellenado, en muchos casos deben esperar a que lleguen los familiares y eso dilata los tiempos de espera de otros pacientes y genera una merma de calidad asistencial, señalan en el hospital.
La petición de aumento de plantilla, según explican fuentes de este sindicato, no implicaría un incremento del presupuesto del hospital, ya que se amortizarían seis vacantes de puestos que no están cubiertos en otras categorías y se convertirían en plazas de celadores para asumir estas funciones. Concretamente, eliminarían cinco vacantes de pinche y uno de lavandería para crear las seis plazas de celador. El sindicato solicita en esta notificación a Sanidad que se inicien todos los trámites para reforzar la plantilla con la creación de 6 vacantes, tal y como se comprometió la dirección de La Fe, que dio el visto bueno en mayo a ampliar la plantilla.
Tras la orden de Sanidad en abril, ahora son las enfermeras las que entregan a los familiares de los fallecidos un listado de funerarias de toda Valencia para que puedan elegir, ya que antes, si no tenían un seguro de decesos, estaban obligados a tener que hacerlo con las empresas de Aseva que estuvieran de guardia en el hospital.
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