Sanidad promete negociar mejoras laborales para frenar las protestas

«Es el momento de negociar». Los sindicatos Satse, CCOO, UGT, CSIF e Intersindical Valenciana han decidido enterrar el hacha de guerra y dejar congeladas, al menos de momento, las protestas de los profesionales por la saturación que sufre el sistema sanitario valenciano.

Portavoces de estas formaciones sindicales, que representan a casi al 95% de los trabajadores de la Conselleria de Sanidad, se han reunido este miércoles con carácter de urgencia con el conseller de Sanidad, Miguel Mínguez a petición de los propios sindicatos.

En el encuentro, según recogen en un comunicado conjunto, «se ha conseguido la convocatoria de una mesa sectorial para el 23 de diciembre de 2022 en la que se negociará la implantación de medidas que mejoren las condiciones laborales del conjunto de trabajadores de la sanidad pública valenciana (unos 70.000), que además redundarán en una mejor atención a la ciudadanía», como reducir la jornada laboral a 35 horas (lo que requerirá una inversión de unos 130 millones adicionales y la contratación de unos 2.500 empleados más).

Tanto los sindicatos como la administración, señalan, «coinciden en que la vía de la negociación es la más óptima en este momento, debiendo dejar las medidas de presión como último recurso, en caso de bloqueo de las negociaciones».

De esta forma, parece que se ha querido dejar al margen al Sindicato Médico de la Comunitat (CESM-CV), que ha convocado una huelga entre los facultativos para los próximos 17 y 18 de enero. Al respecto, el sindicato CSIF también había señalado la posibilidad de extender los paros a otras categorías profesionales dada la situación actual, mientras que el resto de formaciones, al menos de momento, descartaban secundar estas medidas de presión.

Desde CESM-CV, por su parte, recuerdan que el comité de huelga está negociando directamente con la conselleria en relación a las reivindicaciones que se plantearon en la convocatoria de la huelga, como contar con más plantilla, aumentos salariares y mejora de las condiciones laborales.

Por otra parte, la actual presión asistencial (este jueves 35 pacientes esperaban cama en La Fe, algunos durante más de un día, y otros 60 en el General, por ejemplo) no es suficiente para que la Conselleria de Sanidad haya previsto un plan extraordinario de refuerzos para Navidad, como reclaman los trabajadores; aunque este plan sí se activará si la situación empeora. Las plantillas auguran más problemas en las vacaciones.

El presidente del PP valenciano, Carlos Mazón, ha denunciado el «absoluto colapso» que viven los departamentos de salud de la Comunitat a las puertas de las fiestas navideñas, además de criticar que «la Generalitat esté diciendo que va a empezar a pensar el plan (sanitario) de Navidad a diez días de Nochebuena». «Es una de las frases más lamentables que he escuchado».

Así lo ha declarado tras reunirse con representantes del Sindicato de Enfermería de la Comunitat Valenciana (SATSE) en su sede. Actualmente, el incremento de las enfermedades respiratorias tensiona las Urgencias de los hospitales valencianos, mientras la Conselleria de Sanidad ha convocado el 23 de diciembre una mesa sectorial para negociar la implantación de mejoras laborales y del sistema sanitario.

«La situación sanitaria se puede calificar de colapso, es muy preocupante, es impresentable», ha insistido Mazón, para advertir que en el Hospital General de València «no tienen pase» las esperas que deben afrontar los pacientes.

Un «colapso generalizado» ante el que ha defendido que están justificadas las quejas y «protestas permanentes en innumerables departamentos» por parte de los sindicatos.

En el caso del colectivo de enfermeras, el 'popular' ha asegurado que la Conselleria tiene «muchas asignaturas pendientes» y se ha comprometido a incorporar sus reivindicaciones en el programa del PPCV para las elecciones autonómicas de finales de mayo.

Ha vuelto a criticar que algunos representantes de la Generalitat, como el director general de Política Lingüística, Rubén Trenzano (Compromís), aboguen por aplicar el requisito del valenciano a los funcionarios sanitarios «si hay un Botànic III». «Es lamentable, es una medida antisanitaria», ha aseverado.

Al mismo tiempo, Mazón ha coincido con SATSE en que es necesaria una reorganización de la Conselleria de Sanidad porque «se ha demostrado que la estructura no funciona», con la puesta en marcha de una dirección general específica de Atención Primaria y otra de Cuidados, «como corresponde».

También ha abogado por luchar contra la brecha salarial de las enfermeras, desarrollar las especialidades profesionales del colectivo e incluir la figura de la enfermera escolar.

Y ha vuelto a mostrar su «indignación» por el último examen de la oposición de Enfermería, del que se quejaron sindicatos y colegios profesionales porque contenía preguntas alejadas a su realidad laboral: «Hemos solicitado una investigación a fondo y todo el expediente de este examen chapuza y exigimos responsabilidades políticas de inmediato».

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