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Al máximo. Estado que presentaba el pantano de Guadalest ayer. N. Van Looy
El temporal más largo

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Barrancos, ramblas y cauces de la Comunitat continúan desbordados | La preocupación crece por la situación de la presa de Isbert, con agua cayendo en cascada por las escaleras laterales

DELEGACIONES

Jueves, 24 de marzo 2022, 00:16

La borrasca atlántica que afecta a la Comunitat dio este miércoles una pequeña tregua. Aemet mantuvo activado el aviso amarillo por lluvias, que fueron persistentes durante toda la jornada, aunque las cantidades acumuladas no fueron tan importantes como en la jornada del lunes. Si bien, en muchos puntos de la Comunitat se superaron los 50 litros.

El pantano de Guadalest, principal reserva de agua de la Marina Baixa con una capacidad máxima de 13 hectómetros cúbicos, alcanzó ayer su nivel máximo de seguridad y, por ello, tal y como informó el Ayuntamiento de Altea en redes sociales, se iba a proceder a la inminente apertura de sus compuertas para desembalsar agua y no alcanzar límites que pudieran suponer un peligro aún mayor para la infraestructura.

También la preocupación se trasladó ayer a la presa de Isbert, cerca de la cabecera del río Girona, que ofrecía ayer imágenes de agua cayendo en cascada por las escaleras laterales debido a las abundantes precipitaciones registradas en la Vall de Laguar. A algunos vecinos de la Marina Alta les recordó la riada que provocó en 2007. El alcalde, Carles Mengual, señaló que la caída de agua de la presa impresiona pero que aún estaba dentro de la normalidad. Si bien, cabe destacar que se registraron 180 litros en la zona.

En Orba se recogieron más de 110 litros (dato de las 17.00 horas) por metro cuadrado. La persistente precipitación durante toda la jornada provocó desbordamiento de barrancos e incluso la caída de algún árbol a la vía.

En la costa, la acumulación de lluvia y el fuerte oleaje han dañado playas como en la Goleta en Tavernes, en la comarca de la Safor. El mar ha creado grietas en la parte exterior de la infraestructura de hormigón de las compuertas del lago artificial de agua dulce de esta zona. En el municipio temen que si la fuerza del oleaje continúa, el agua salada llegue hasta el lago. «Pondría en peligro decenas de especies autóctonas, peces, aves y fauna que se han introducido en estos años creando un hábitat similar al de un ullal», precisó el edil de Urbanismo Josep Llàcer.

Un manto de cañas y basura cubre la playa del Marenyet de Cullera. Una imagen que, por desgracia, ya es habitual para los vecinos de la zona ya que tras cada temporal, la arena desaparece y es sustituida por todos los residuos que arrastra el río Júcar.

También llegaron a Cullera cañas, plásticos y animales muertos. «Queremos decir basta a esta situación. No son hechos aislados, es recurrente tras cada temporal. Si a través de la política no se soluciona, tendremos que recurrir a la justicia», amenazó el alcalde, Jordi Mayor, que volvió a reclamar soluciones a la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Uno de los municipios donde más cantidad de lluvia se está registrando es en Barx, algo que también está afectando a Tavernes al obligar a cortar caminos por el aumento del caudal del río Vaca.

En Sagunto, el temporal vuelve a afectar por la pérdida de arena. Según Pepe Gil, concejal de Compromís en el Ayuntamiento, «aunque este no es de los temporales más importantes que ha habido y que no tiene comparación con Gloria, ha dejado un paisaje sin arena, la que habían tirado de nuevo y por lo tanto todo el dinero gastado se ha desperdiciado». Ha insistido en pedir que los proyectos que se lleven a cabo «sean sostenibles en el tiempo, tanto económica como medioambientalmente».

En Riba-roja de Túria el problema se ha producido en el casco urbano. Concretamente por la acumulación de agua a la entrada del polígono El Oliveral con la entrada del Parque Logístico de Valencia.

Al respecto, el alcalde, Robert Raga, anunció que se pondrá en contacto con las administraciones pertinentes para reclamar que se solucione cuanto antes. Esta circunstancia es consecuencia del corte del barranco que viene de Loriguilla y que se ejecutó con el Plan General de Ordenación Urbana. Las tuberías colapsan al no poder desaguar toda la cantidad de agua que recogen haciendo dique e inundando todos estos accesos.

Pero el episodio de lluvias de estos días también dejó el miércoles nuevas incidencias por toda la Comunitat. Durante toda la jornada permanecieron cortadas carreteras como la CV-421 a la altura de Chiva, así como la CV-425 en Cortes de Pallás y la circulación estuvo condicionada por inundación en la CV-426 a la altura de Buñol.

También continuaron cortados muchos caminos debido a que barrancos, ramblas y cauces de ríos aún bajaban con mucha agua. De hecho, tres dotaciones del parque de la Plana Baixa y Espadà Millars de Castellón rescataron a dos personas atrapadas en el interior de su vehículo, atascados por el agua al paso por el barranco en camí La Rambla de Onda. En Sant Mateu, el Baix Maestrat, una vivienda deshabitada se derrumbó y se tuvieron que desalojar las casas colindantes como medida preventiva. Servicios tan importantes como el del abastecimiento del agua potable también se han visto afectado como consecuencia de las lluvias. Municipios como Navarrés (Canal de Navarrés) y l'Alfàs del Pí (Marina Baixa) han prohibido el consumo humano debido a la turbidez detectada.

Temor por los cultivos

Otra de las consecuencias de las incesantes lluvias está en el campo. Si bien los agricultores recibieron esta agua con esperanza tras meses invernales de sequía, la persistencia en las precipitaciones comienza a preocuparles.

Es por ello que desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) advierten de que la acumulación de agua puede acabar ocasionando graves daños en algunos cultivos, sobre todo cítricos, hortalizas, frutas de hueso y almendras, debido al exceso de humedad en las explotaciones, los ataques de hongos y la interrupción de las labores para garantizar el adecuado desarrollo de las producciones vegetales. De hecho, aseguran que empiezan a detectarse problemas en el regadío «que podrían agravarse tanto en las cosechas que están pendientes de recolección como en aquellas que se hallan en plena fase de floración o cuajado».

Además, desde la patronal agraria apuntan que las rachas de viento ya han ocasionado daños por 'rameado', es decir, por golpes en la piel a causa del movimiento brusco de las ramas, y caída de frutos al suelo.

Las hortalizas de temporada también pueden sufrir ataques intensos de hongos, con la consecuente pérdida de cosecha y temen también podredumbre en flores y frutos de almendro. Entre los frutales de hueso, les preocupa la evolución los que están en el inicio de la etapa de cuajado. La aparición de hongos como la 'abolladura' podría mermar las futuras producciones.

Es por ello que AVA-ASAJA solicita ayudas para facilitar la adquisición de productos fungicidas con los que poder minimizar los daños provocados por los hongos y exige al Gobierno que amplíe las medidas fiscales, laborales y de financiación aprobadas al considerarlas "totalmente insuficientes" para paliar las pérdidas por adversidades climáticas y problemas de mercado en el sector agrario.

Avisos en Castellón

Para este jueves, Aemet mantiene aviso amarillo por riesgo de lluvias de hasta 60 litros por metro cuadrado en 12 horas en el interior norte y sur y litorar sur de Castellón.

En el resto de la Comunitat, las precipitaciones serán generalizadas, localmente persistentes, con intervalos de viento fuerte de componente este en el litoral en las horas centrales. Las temperaturas máximas subirán ligeramente.

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