Este será el valenciano de la calle que impulsa el Consell

La Acadèmica Valenciana de la Llengua (AVL) ya ha recibido los nuevos criterios lingüísticos sobre el uso del valenciano que aplicará la administración autonómica tras el cambio de gobierno. Se trata de un libro de estilo que recoge las normas preferentes para las comunicaciones formales de la Generalitat, tanto internas como externas e incluyendo los escritos oficiales que llegan a los ciudadanos, así como las reglas a las que atenerse en el registro oral. Por ejemplo, a la hora de atender a cualquier persona que se dirige a una ventanilla oficial.

El dossier, de algo más de ochenta páginas, sustituye al que aprobó el Botánico. El siguiente paso es que la entidad estatutaria elabore un informe sobre el mismo, incluyendo las mejoras que considere oportunas, que serán remitidas a la Conselleria de Educación para su toma (o no) en consideración. Sobre su entrada en vigor, el conseller José Antonio Rovira no ha dado plazos, si bien confía en que llegue pronto. Y en cuanto al objetivo del cambio, ha añadido, es «valencianizar el valenciano que se utiliza en la administración».

Así se ha pronunciado tras participar en la primera reunión entre el equipo directivo de la AVL y los responsables de la Dirección General de Ordenación y Política Lingüística de la conselleria, un encuentro que ha servido para trasladar un documento en el que «casi todas las cuestiones están ya recogidas en el diccionario normativo».

«Durante muchísimos años había unos criterios que el Botánico decidió cambiar. Lo que ahora pretendemos es volver a situarnos en una situación digamos que centrada, para que el valenciano de la administración se adapte a las formas con las que los valencianos lo utilizan», ha insistido Rovira, que ha añadido que a su juicio los criterios «se habían catalanizado» por parte de los anteriores gestores.

Entre las novedades, se incorpora el artículo neutro 'lo' en comunicaciones administrativas de carácter oral o en escritos poco formales, como pueden ser libros de fiestas, si bien se recomiendan otras en escritos formales. También se considera aceptable el sufijo '-iste' (artiste, taxiste) para el masculino, en lugar del invariable '-ista'.

Los nuevos criterios también recomiendan el uso de los demostrativos simples -'este/a/s/as'- en lugar de 'aquest/a/os/es' y de los verbos incoativos con la forma '-ix' en sustitución de '-eix'-. Además, algunos verbos de la tercera conjugación como 'afegir' o 'llegir' admiten ahora la flexión pura y la incoativa. Es decir, se puede utilizar tanto 'afigc' com 'afig'. Lo mismo pasa con el verbo 'voler', pues tanto las formas 'vullc' como 'vull' son aceptadas.

En cuanto al pronombre personal 'feble' de segunda persona del plural, se insiste en utilizar la forma 'vos' tanto delante como detrás del verbo. Por ejemplo: «vos va donar diners» o «m'he alegrat molt de vore-vos», mientras que en relación a la preposición 'per a' se señala que se utiliza con complementos que indican finalidad o destinación en contextos como los siguientes: «T'estaven buscant per a preguntar-te alguna cosa», «he vingut tan prompte com he pogut per a intentar ajudar-te» o «no guanya prou diners per a pagar el lloguer».

Por lo que respecta a cuestiones de preferencias léxicas en las comunicaciones administrativas, tanto orales como escritas, se recomienda buscar la forma más cercana al interlocutor, siempre dentro del marco establecido por la normativa lingüística. Así, se aceptan formas como 'agarrar', 'faena' o 'pròxim' además de 'agafar', 'feina' o 'proper'. «Los criterios tratan de acercar el valenciano de la administración al que hablan los valencianos», ha remarcado Rovira.

Por su parte, la presidenta de la AVL, Verónica Cantó, ha señalado que acaban de recibir el documento y que «se tiene que leer con atención para hacer las sugerencias que se estimen convenientes», antes de recordar que los criterios son el libro de estilo de la Generalitat «y que se deben ajustar, como ha dicho el conseller, a la normativa de la Acadèmia». Dicho de otra manera, que su aplicación última es una competencia del Consell. «Se hará un análisis que se remitirá con propuestas de mejora y se decidirá sobre su aceptación, como no puede ser de otra manera», ha zanjado, justo antes ser preguntada por si era preceptivo modificar los criterios. Cantó, en este punto, ha preferido evitar charcos. «Este libro de estilo es responsabilidad del Consell», ha insistido.

El director general de Política Lingüística, Ignacio Martínez, ha señalado que se ha querido ir más allá de los registros formales escritos, entrando en aspectos del ámbito oral y más coloquial, con la idea de que su uso sea preferente por parte de los trabajadores de la Generalitat. Eso sí, ha recordado que los nuevos criterios no implican derogar los anteriores, en el sentido de que todas las formas recogidas en el diccionario normativo de la AVL son válidas.

Por último, preguntado por la homologación de los títulos de valenciano que ofrecen entidades valencianistas como Lo Rat Penat, Rovira ha señalado que el asunto no se ha tratado en la reunión, y que hoy por hoy las acreditaciones oficiales son, entre otras, las que expide la Junta Qualificadora de Coneixements de Valencià (JQCV).

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