Los voluntarios de 'Valenbisi'

Pasa un camión militar cuyos neumáticos son más grandes que una persona. Detrás, otro remolque con capacidad para transportar un buen puñado de coches convertidos en chatarra, de los que dos semanas después aún hay a montones en Catarroja. Luego sale Víctor, le sigue Manu, Diego... y Juan. Han encontrado el momento de abandonar la gasolinera polvorienta que se ha convertido en punto de encuentro de voluntarios. Pedalean con la soltura que lo permiten unas bicicletas pensadas para un uso urbano, y no desde luego en el epicentro de la tragedia ocasionada por la DANA.

Pero estos cuatro chicos malagueños hallaron en estas pesadas monturas de ruedas macizas un modo de evitar una caminata de hora y media hasta Catarroja. «Nos alojamos en un hostal en el centro de Valencia. Miramos para alquilar unas motos y luego vimos este servicio, nos cuadraba», señala Juan. Más barato y, además, con la posibilidad de acceder a las bicicletas y disponer de ellas durante 24 horas. Los cuatro chicos tienen apenas un par de días para apoyar a los damnificados por la DANA y han decidido exprimirlas.

Este martes se levantaron de buena mañana después de haber descansado de las seis horas de viaje que separan Valencia y Málaga: «Nos fuimos turnando». Se desplazaron en un coche y planificaron una jornada intensa en dos de las localidades más afectadas por la tragedia del pasado 29 de octubre: Paiporta y Catarroja. Primera parada, en la localidad que ha quedado casi totalmente arrasada y más cercana a la capital del Turia.

Allí encontraron a un hombre limpiando un patio. «Lo tenía todavía todo lleno de fango, iba a tardar un buen rato si lo hacía él solo», comenta Juan. Pero apareció el 'Comando Valenbisi' a su rescate. Al suyo y al de otros vecinos, de los muchos que todavía deben extraer barro de un garaje. «Después hemos estado subiendo agua embotellada a personas mayores que no pueden bajar todavía a la calle, o que les es complicado llevar peso hasta sus hogares», explican. Una vez realizados estos trabajos, cambiaron de destino.

No porque en Paiporta dejasen de ser necesarios. Ojalá. Más bien, por prestar ayuda también en otra localidad azotada sin piedad por la DANA. «Ahora hemos venido hasta Catarroja. El plan es el mismo que en la anterior parada: buscar a personas que necesiten ayuda y pasar un buen rato aquí», subraya Juan.

Este miércoles el despertador volverá a sonar temprano. Los voluntarios de 'Valenbisi' repetirán procedimiento... si la meteorología lo permite. «Sólo podemos estar aquí dos días. Los cuatro trabajamos y es el tiempo libre del que disponíamos», comentan. Ni siquiera miraron la previsión del tiempo.

«Nos dio igual hacernos tantos kilómetros para estar sólo dos días. Vimos por televisión la situación en la que estaban estos pueblos de Valencia y quisimos venirnos a ayudar. Aunque sólo fuera un poco», resalta Juan. Y como el tiempo es oro y no les sobra, enseguida vuelven a montarse en las bicicletas de alquiler. Usan sus piernas para adentrarse en Catarroja. Los vecinos agradecerán la ayuda durante unas horas de ocho brazos fuertes más.

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