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Edificio principal de los juzgados de Ontinyent. LP
La dificultad para cubrir bajas provoca una alta carga de trabajo en los juzgados de Ontinyent

La dificultad para cubrir bajas provoca una alta carga de trabajo en los juzgados de Ontinyent

Los sindicatos piden comarcalizar la oferta y cambiar los criterios de la bolsa y Justicia asegura niega que haya colapso

B. González

Ontinyent

Martes, 31 de mayo 2022, 16:55

Con un solo funcionario se ha encontrado el juzgado número 1 de Ontinyent de los siete de que dispone y en el último mes se han ofertado plazas hasta tres veces sin que se cubran. Una situación que también se da en el resto de juzgados excepto en el 3. Eso está provocando las quejas del personal por el aumento de la carga de trabajo y los retrasos en la tramitación de expedientes.

Los sindicatos denuncian el grave problema con el que cuenta el partido judicial de Ontinyent porque resulta difícil cubrir bajas. Así lo reconoce la propia conselleria de Justicia, "es muy difícil encontrar candidatos que suplan las bajas debido a la distancia".

Y es que, como explican desde CSIF y UGT, la ley ampara a las personas inscritas en bolsa, que pueden rechazar una oferta si se encuentra a más de 60 kilómetros de su lugar de residencia. Eso es comprensible aún más cuando muchas veces se ofertan dos meses. "Al final no les interesa porque no les compensa", subraya Bruno Antuña, delegado de CSIF Justicia en este partido judicial.

Es por ello que piden soluciones para evitar que la situación continúe empeorando. Desde el CSIF proponen llegar a acuerdos con colegios de abogados de la zona para que gente no admitida en bolsa y "que están deseando trabajar" puedan acceder a unas de estas ofertas y que en la web institucional se ofrezcan esas plazas para la gente que sí esté dispuesta a trabajar. "Lo que no es razonable es que en un país con 3 millones de parados en un juzgado haya plazas vacantes", señala Antuña.

También critica el tiempo que pasa entre el momento en que una persona acepta una plaza y comienza a trabajar. "Puede pasar más de un mes", señala y lo achaca a la excesiva fiscalización. "Eso solo pasa aquí, en la Comunitat Valenciana, no en otras comunidades".

La propuesta de UGT pasa por "comarcalizar" las ofertas. "En lugar de ofertarlas a toda la Comunitat Valenciana, que se haga por comarcas", explica el delegado de UGT Justicia en este partido judicial, Guillem Sisternes, quien también denuncia que la actual bolsa "en ningún momento se ha negociado" y pide eliminar la opción de poder renunciar por distancia.

Sisternes también muestra el malestar existente porque había previsto dos refuerzos para el juzgado número 4, "pero Hacienda ha dicho que no y no hemos quedado sin refuerzos", recordando que el único que cuenta con esta ayuda es el número 3.

Es más, desde UGT no hablan ya de cubrir las plazas vacantes por bajas o dotar de refuerzos al resto de juzgados, sino que consideran necesario un juzgado más en este partido judicial "para repartir la carga de trabajo".

Por debajo de la media

Dede la conselleria de Justicia niegan carga de trabajo o colapso por este motivo. "En los juzgados de Ontinyent la carga de trabajo está por debajo de la media con 623 asuntos anuales por juzgado en la jurisdicción penal (la media es 680, según el Consejo General del Poder Judicial) y 681 en la jurisdicción civil (también con una media de 680)", explican e indican que estos datos sitúan a Ontinyent en el puesto 25 de carga de trabajo y muy lejos de los más saturados como Llíria, Requena o Alzira que superan los 1.000 asuntos anuales en alguna de las dos jurisdicciones.

Según Justicia, el partido judicial de Ontinyent, con cuatro órganos judiciales mixtos, tiene una plantilla total de 26 funcionarios y asegura que sólo hay dos personas de baja médica, concretamente un gestor y un tramitador. "Las bajas se notificaron el 9 de mayo y están ahora en trámite de ser cubiertas", indican fuentes de la Conselleria, que insisten en las dificultades existentes en encontrar candidatos para suplir estas bajas.

Por otra parte, está el problema de la sede judicial como tal. Los juzgados están repartidos en varios edificios y las obras del nuevo edificio no se esperan que se inicien hasta 2023. "El servicio público que se presta es un trastorno para los ciudadanos", señalan los sindicatos.

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