El IVAM tendrá nueva dirección antes de Fallas

Así las cosas, como ha podido confirmar LAS PROVINCIAS para «antes de Fallas» el IVAM tiene previsto aprobar la asignatura pendiente que atenaza su gestión. Decir antes de Fallas no es facilitar la fecha exacta, pero lo que sí aclara la inminencia de la resolución de un asunto que mantiene inquieto al universo cultural valenciano. Aun así, las fuentes más cautas consultadas, se guardan en la manga ese as que apunta la popular frase siempre que no surja ningún imprevisto.

El proceso de selección iniciado el pasado verano se vio alterado y, por tanto, retrasado como consecuencia de la solicitud de una cautelarísima por parte del jurista y coleccionista de arte Luis Trigo. Hasta ese momento, según confirmó este diario eran una decena los nombres que se postulaban para el puesto, aunque una vez levantada la cautelarísima, el plazo seguía abierto y cabía que todavía llegara algún otro candidato.

El museo de Guillem de Castro, referente público del arte moderno en Valencia, camina sin rumbo cierto, con una dirección provisional, y algunos apuntan incluso que más bien bajo las directrices a distancia, concretamente desde Lisboa desde que la anterior responsable artística de la casa, Nuria Emnguita, dejara el puesto hace ya un año, en febrero de 2024, para tomar la dirección del museo de arte contemporáneo MAC/CCB de la capital portuguesa. La actual directora provisional, Sonia Martínez, ocupó la dirección adjunta en el mandato de Nuria Enguita.

Sea como sea, lo cierto es que las salas de un museo que cumple 36 años cuenta con un equipo directivo de cuyo trabajo no resultan los frutos que se esperan para un espacio expositivo que cuenta con una de las mejores colecciones de arte moderno de España.

En el IVAN se lleva tiempo echando en falta una programación expositiva capaz de entusiasmar, de atraer al público, que no llega en la cantidad deseable a sus salas. La pasada Navidad el espacio contaba con tres salas cerradas y se ha dado la circunstancia, como ha podido constatar este diario, de que en alguna de las visitas guiadas a una muestra, sólo una persona esperaba ese recorrido.

Tratándose de un espacio de titularidad pública, no cabe duda de que las directrices políticas que desde la Conselleria de Cultura se tomen a la hora de definir una política cultural son determinantes, pero no sólo. La mirada, la gestión de los equipos directivos son esenciales para renovar la savia de un espacio que vivió grandes momentos, pero que como nada ni nadie se puede mantener sólo de las rentas del pasado. Y así, ya es un convencimiento generalizado, el IVAM requiere cuanto antes de director o directora que tome el timón para definir el rumbo hacia el futuro. Ahora, puede estar más cerca.

 

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