Año de cambios para el Bellas Artes

Un museo siempre está en construcción. Los cambios en los centros de arte van, como en palacio, despacio. Los anuncios de los gestores públicos tardan en materializarse. El Museo de Bellas Artes de Valencia es un ejemplo de cómo se dilatan las iniciativas. En febrero se anunció que el San Pío V reabriría la tienda de la pinacoteca. Diez meses después, el espacio reservado al local sigue con la puerta cerrada.

Para evitar prorrogar en exceso la fatal de tienda, la Dirección General de Cultura y Patrimonio va a reproducir en el Bellas Artes de Valencia la fórmula del Centro del Carmen. Para facilitar a los visitantes el servicio de venta de catálogos de arte y de exposiciones, Cultura está trabajando en la reorganización del hall del museo para que la recepción esté más centrada en la zona de la cúpula. Así, «el espacio donde ahora está la recepción, se destinará a la exhibición y venta de estos catálogos», según fuentes de la conselleria.

También está previsto que durante 2020 se actualice completamente el sistema de climatización del museo, que en el pasado ha ocasionado daños en las piezas de arte. La empresa adjudicataria de las obras está realizando los trabajos de instalación de la nueva climatización de las fases III y IV del museo. «Se trata de instalar seis nuevos equipos que suministren agua fría y caliente simultáneamente según las necesidades que se tenga. Se trata de la primera fase de dos fases que se tiene previsto acometer para actualizar completamente el sistema de climatización», según Cultura.

Las obras han sido adjudicadas por un importe de 523.027 euros. «Se están cumpliendo los plazos del contrato y la previsión es que en febrero esté concluida la instalación de las máquinas», añadieron las mismas fuentes, quienes remarcaron que el funcionamiento del museo no se está viendo alterado porque no es necesario cerrar salas para realizar estas actuaciones.

Cultura también está ejecutando la nueva web del Bellas Artes. En estos momentos se trabaja «en la fase de migración de información al nuevo formato web. Cuando los técnicos de la Departamento de Tecnologías de la Información de la Generalitat (DGTIC) completen el trabajo, se abrirá la web». Los plazos que se manejan desde la DGTIC es que pueda estar activada durante el primer semestre de 2020.

Para lo que no se manejan plazos es para el aumento de la plantilla. El BellasArtes de Valencia es uno de los museos estatales del país con menos número de conservadores y restauradores. En estos momentos la Dirección General de Función Pública tiene pendiente de convocar en la Oferta de Empleo Público de 2018 «diez plazas de técnico superior de administración cultural y cuatros plazas de técnico de gestión de administración cultural al que se podrán presentar licenciados en Bellas Artes, Geografía e Historia y titulados o máster en restauración», según fuentes del departamento que dirige Vicent Marzà.

Respecto a la autonomía del museo que dirige Carlos Reyero, Cultura se mueve en dos plano:uno a corto-medio plazo, que es la modificación del decreto 211/ 91 (que regula los órganos de gestión del museo) y otro a medio-largo plazo que supondría la creación una ley que dote de autonomía al museo.

El cambio del decreto incluye la «desconcentración del centro, dotará a la dirección del museo de más capacidad de autonomía en las decisiones». La norma ha pasado por Función Pública y Presupuestos con informes favorables. Ahora irá al Consejo Jurídico Consultivo, que debe emitir informe y cuando esté se podrá pasar para ser aprobado en el Pleno del Consell», como detallan las mismas fuentes.

La posibilidad de analizar la creación de una ley propia al Museo de Bellas Artes «es una cuestión en la que hay que explorar diferentes vías dado que el centro es de titularidad estatal y todas las decisiones sobre la reglamentación jurídica del museo tienen que tomarse de forma conjunta por ambas instituciones», añaden. Una de las opciones es que el Ministerio de Cultura valore pasar la titularidad a la Generalitat Valenciana y elaborar una ley de autonomía como la tienen otros museos o que, sin tocar la titularidad, se pueda facilitar un mecanismo que conceda mayor autonomía a la pinacoteca valenciana.